140 civiles, entre los que se encuentran niños y ancianos, sobreviven en un refugio anti-bombas de la ciudad de Rubiznhe. La ciudad ha quedado prácticamente destruida tras una ofensiva rusa
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, asegura que Rusia ha ocupado ya el 20% del país. A punto de cumplirse 100 días de la invasión de Ucrania, confía en el armamento que va a recibir de Occidente para frenar la ofensiva de Putin en el Donbás.
Mientras tanto, las tropas rusas tratan de hacerse con el control de Rubiznhe, una ciudad perteneciente a la región de Lugansk situada en el este de Ucrania. Allí, una ofensiva ha destruido la mayoría de los edificios y aleas enteras también han sido arrasadas. Además, en sus calles se observa la huella que dejan los enfrentamientos en los cientos de vehículos militares abandonados.
Allí, los civiles se agrupan en refugios anti-bombas desde hace meses. 140 personas, entre los que se encuentran sobre todo niños y personas mayores, viven en un sótano en el que no hay electricidad, ni agua, ni gas. Algunos de ellos cuentan que les traen agua, leña, les cocinan y les traen agua caliente.
Por otro lado, con la región de Lugansk casi en manos rusas, el ejército de Ucrania vigila las principales carreteras para que las fuerzas invasoras no avancen en Doneskt.
Nacho Cabrera