Se registran concentraciones de dióxido de azufre y temperaturas de casi 1.000 grados en zonas del volcán de La Palma, cuando han pasado ocho meses del final de la erupción
El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha medido concentraciones de dióxido de azufre (SO2) «muy altas» en los cráteres más al sur del volcán en Cumbre Vieja, La Palma, a pesar de que han transcurrido casi ocho meses desde el fin de la erupción.
El IGN informa en las redes sociales de estas mediciones, así como de la presencia de fumarolas «con alto contenido» de vapor de agua, lo que, aclara, «es habitual» en esta fase posteruptiva.
La red social Twitter se ha convertido en el canal por el cual investigadores y expertos ofrecen información directa a la ciudadanía acerca de la evolución del volcán de La Palma. El vulcanólogo del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Rubén López, compartía también este viernes 5 de agosto un vídeo en el que toma la temperatura a la ceniza de uno de los cráteres del edificio volcánico de la erupción de La Palma.
En las imágenes se aprecia cómo tras introducir el termómetro en la ceniza unos 5 – 7 centímetros, este pasa de 28º a 70º centígrados. Esto es debido a que en el interior del edificio volcánico todavía permanecen lavas e incandescencias que alcanzan los 1.000º centígrados, tal y como informaba hace unas semanas, también a través de Twitter, el volcanólogo del IGN Stavros Meletlidis.
Así mismo, López mostraba imágenes en las que podemos apreciar a simple vista la presencia de vapor de agua y dióxido de azufre, «habituales en este momento post eruptivo», en zonas del cráter.
Ocho meses después de que finalizara la actividad eruptiva del volcán de La Palma, el 13 de diciembre de 2021, continúa la monitorización de los parámetros físicos y químicos asociados a la erupción.
La lava del volcán de La Palma alcanza temperaturas que rozan los 1.000º
También el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) se sirve de las redes sociales para informar a la población de las actividades que continúan realizando en Cumbre Vieja así como de los resultados de sus investigaciones.
En este tweet del miércoles 3 de agosto, el IGME muestra a un equipo de técnicos mientras realiza mediciones en uno de los cráteres. En esta ocasión, el termopar registró una temperatura de 800 ºC en la incandescencia. Unos 173º menos de lo que indicó una semana antes el vulcanólogo Stavros Meletlidids, también en twitter.
La presencia de gases Puerto Naos y La Bombilla impide regresar a los vecinos desalojados
El núcleo turístico de Puerto Naos, en el municipio palmero de Los Llanos de Aridane, lleva más de 10 meses evacuado debido a la presencia de gases asociados a la erupción. Tanto en esta zona, como en la de La Bombilla, se registran picos diarios de CO2 entre 5.000 y 50.000 ppm, siendo este último límite el superior que pueden detectar los sensores de estas estaciones. Unas cantidades a la que este gas, inocuo en bajas concentraciones, resulta tóxico.
Como se aprecia en el gráfico adjunto, obtenido a través de la aplicación del Servicio de Innovación del Cabildo de La Palma, y correspondiente a la primera semana de agosto, en el núcleo turístico de Puerto Naos se registran picos diarios de dióxido de carbono (CO2) superiores a los 50.000 ppm en algunas zonas. Si nos fijamos en la media diaria*, en lugar de la máxima diaria*, esta cifra se reduce hasta los 2.700 ppm.
Unas cifras preocupantes que indican riesgo de «toxicidad directa», niveles «incompatibles con la vida humana». Las categorías de peligrosidad van desde Admisible – Peligro – Límite de exposición – Peligro inmediato y Toxicidad directa.
Se permite el acceso durante 4 horas a Puerto Naos y La Bombilla
El pasado viernes 22 de julio, el Cabildo de La Palma autorizó el acceso a sus viviendas por un tiempo limitado de 4 horas a los vecinos de las calles Atardecer, Maresía y parte de Los Lajones.
Días más tarde, el 29 del mismo mes, el comité asesor del Plan de Emergencia Insular de La Palma (Peinpal) amplió el perímetro establecido para el acceso de vecinos de Los Lajones, en Puerto Naos, a sus hogares.
La medida se tomó para que pudieran realizar tareas de mantenimiento y ventilación de las viviendas, que desde el comienzo de la erupción permanecían deshabitadas. De este modo, las personas que deseen entrar a sus viviendas para realizar labores de mantenimiento y limpieza deben solicitar un código QR con antelación.
A día de hoy son 117 las personas de Puerto Naos y La Bombilla que continúan alojadas en hoteles, “lo que supone que sigue poniendo de relieve el problema que tenemos con los gases en la zona de la Costa y que dificultan el retorno a estos núcleos”, aseguraba el presidente insular, Mariano Hernández Zapata.