El proyecto formativo de CEAR Canarias ofrece a las personas migrantes una oportunidad de inserción laboral a través de la formación y la cocina
La gastronomía siempre ha sido una herramienta para el intercambio cultural y la inserción en el mercado laboral. Una treintena de personas migrantes encuentran una oportunidad en la cocina a través de un proyecto formativo de CEAR Canarias.
Daniel llegó a Canarias desde Venezuela hace 9 años. Empezó a formarse en repostería en Estados Unidos y ahora aprende de cocina y de culturas.
El alumno del proyecto PIIIL CEAR Cocina, Daniel Piñero, afirma que «cada uno aporta sus conocimientos y técnica. También hemos reinventado recetas originales canarias, aportando un toque más o menos moderno».
Este concurso es la demostración de nueve meses de aprendizaje. El alumnado pone su talento en la cocina; y el Cabildo de Gran Canaria, el producto local.
Entre los requisitos para participar en este certificado de profesionalidad están hablar un mínimo de español, tener más de 16 años y estar en desempleo. Un programa que está en marcha desde 2011 y que tiene una inserción laboral del 80%.