La primavera, que comienza el 20 de marzo, se prevé normal en cuanto a lluvias y muy templada, tras el invierno más cálido en Canarias desde 1961
Canarias ha vivido el invierno más cálido de su historia, con 2,5 grados por encima de la media del periodo de referencia (1991-2020), y el primero en más de un siglo en el que no se registra precipitación en forma de nieve en el Observatorio de Izaña, en Tenerife, a 2.364 metros de altitud.
Estas son las principales conclusiones del balance climatológico del invierno 2023/2024 que ha presentado este jueves el delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Canarias, David Suárez. Ha destacado además que únicamente doce días de este periodo han estado libres del efecto del polvo en suspensión en el archipiélago. Una situación inusitadamente extraña en estas latitudes y en estos meses.
Además, en cuanto a las precipitaciones acumuladas, las islas solo registraron algo más de 36 litros por metro cuadrado, lo que supone un 28 % de lo normal en este periodo en Canarias, que es de 130 l/m2, con un enero que fue extremadamente seco. Solo se recogió un 13 % de lo habitual.
Los próximos trimestres serán más cálidos y secos
En una rueda de prensa celebrada en la sede de Delegación del Gobierno en Las Palmas de Gran Canaria, Suárez ha remarcado que estos datos muestran una evolución del clima en Canarias en una tónica que puede estabilizarse a largo plazo, con una tendencia hacia el aumento de temperaturas y unas precipitaciones más bajas en la región subtropical entre un 7 y un 10 % de aquí a 2050.
Sobre lo inusual en concreto de este invierno climatológico, periodo que no coincide con el invierno astronómico puesto que va desde el 1 de diciembre al 29 de febrero, ha explicado que ha estado marcado por el fenómeno de El Niño (la oscilación térmica cíclica del Pacífico, que condiciona el clima mundial), y que espera pueda irse debilitando conforme avance el año.
Si bien, según el adelanto de cómo será la primavera, se prevé que los próximos trimestres sigan siendo más cálidos y secos de lo normal.
Temperaturas 2,5 grados más altas de lo normal
Las temperaturas en este invierno climatológico han presentado una anomalía de 2,5 grados positivos, para una media de 17,7 grados en estos meses, que le convierten en el más cálido desde que se tienen registros, 1961, y que fue especialmente acusado en los meses de enero y febrero, ambos considerados los más cálidos de la historia.
Únicamente seis días de diciembre tuvieron temperaturas por debajo de lo normal en el periodo de referencia, por lo que el invierno se caracterizó por episodios muy cálidos y, además, muy intensos en cuanto a desviación de lo normal.
Las anomalías estuvieron más marcadas en las medianías y cumbres del archipiélago. Además en enero se alcanzaron 31,7 grados en La Oliva (Fuerteventura), la temperatura más alta de cualquier invierno en el archipiélago.
En enero solo llovió 4,7 litros por metro cuadrado
En cuanto a las precipitaciones, solo cayeron 36,3 litros por metro cuadrado de media en todo el invierno climatológico, es decir, un 28 % de lo normal en base al periodo de referencia, con un enero que fue, además, extremadamente seco.
En el primer mes de 2024 solo llovió 4,7 litros por metro cuadrado de media en el conjunto del archipiélago (el 13 % de lo esperado).
En diciembre, por su parte, llovió un 41 % de lo esperado, con 23,3 milímetros de media, mientras que el febrero cayeron 8,6 litros por metro cuadrado de media, un 23 % de lo normal en el periodo de referencia.
El carácter seco o muy seco ha sido el predominante en gran parte del archipiélago, a excepción de la zona norte de Gran Canaria y nordeste de Tenerife (Anaga) y La Palma, donde ha sido calificado de normal.
El año hidrológico, que empieza el 1 de octubre, se ha saldado con 82,7 milímetros de media, el 41 % de lo esperado, lo que le sitúa como el cuarto más seco desde 1961.
Calima el 85 % de los días del invierno
En los datos facilitados este jueves por la Aemet también se refleja que este invierno ha tenido más episodios de calima en el archipiélago de lo normal. El 85 % de los días entre el 1 de diciembre y el 29 de febrero tuvieron presencia de polvo en suspensión en la atmósfera.
En este periodo, ha habido seis días de calima intensa, es decir, aquella que afecta a la visiblidad por debajo de los 10 kilómetros. Solo en doce días los canarios se libraron del influjo del polvo sahariano.
Por primera vez en 108 años desde que se tienen registros, no ha habido precipitación en forma de nieve en el Observatorio de Izaña, superando los 0,9 milímetros de 2003 que hasta la fecha eran el registro más bajo.
En cuanto a la temperatura del agua del mar, también ha sido destacado que en este invierno climatológico ha sido superior a lo normal en 1,6 grados, hasta situarse en los 21,71 grados.
Finalmente, este ha sido el tercer invierno con más horas de sol desde que se tienen registros en Canarias, con 741 horas.
La primavera registrará temperaturas altas en todo el país
En la presentación de la predicción estacional primaveral y el balance climático del invierno, Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia de Meteorología (Aemet), ha avanzado que todo apunta a una primavera con valores altos. Además, ha resaltado que desde 2018 ninguna primavera ha sido más fría de lo normal.
«Hay una altisima probabilidad de que este trimestre sea muy cálido», ha observado el portavoz de Aemet.
En cuanto a las lluvias en la estación primaveral, Del Campo ha observado que, de momento, no hay ninguna «señal clara de más o menos precipitaciones», excepto en Canarias. En las islas, según ha dicho puede ser una primavera más seca de lo normal.
En España, la primavera, que este año durará 92 días y 18 horas hasta el 20 de junio, arroja una temperatura media de 13,6 grados y acumula una precipitación media de unos 173 litros por metro cuadrado.
Con respecto al invierno que ya termina, el portavoz ha subrayado que ha tenido una anomalía térmica en la península de 1,9 grados por encima de lo normal para la época con una media de 8,5 grados y ninguna ola de frío, lo que pone de manifiesto la tendencia al alza de inviernos mucho más cálidos y más secos.
En este punto Del Campo ha explicado que, «aunque la serie histórica oficial en España arranca en 1961, sí que podemos decir que se ha tratado del invierno más cálido en España desde, al menos, 1870″.
Asimismo, y en la misma línea cabe destacar que de las últimas 7 estaciones meteorológicas completas, cuatro de ellas -verano y otoño de 2022, primavera de 2023 e invierno de 2023-2024- han sido las más cálidas de la serie histórica.
Temperaturas del invierno 2023-2024
Por zonas, el invierno fue extremadamente cálido en la región mediterránea y muy cálido en el resto de la España peninsular. En Baleares fue muy cálido, mientras que en Canarias tuvo carácter extremadamente cálido, y aunque hubo episodios fríos con valores por debajo de los normales, ninguno puede considerarse como ola de frío.
Destacaron, por su intensidad y duración, los episodios entre el 21 de enero y el 9 de febrero y entre el 12 y el 22 de febrero, ambos con máximas y mínimas muy por encima de los valores habituales para la época del año.
Otros episodios cálidos importantes fueron los de los días 8 a 13 de diciembre, 29 de diciembre a 4 de enero, y 13 a 19 de enero. En cuanto a bajas temperaturas, hubo varios episodios fríos con temperaturas por debajo de las normales, si bien ninguno de ellos puede considerarse como ola de frío.
Precipitaciones del invierno 2023-2024
En cuanto a las precipitaciones, desde Aemet han precisado que han estado «desigualmente repartidas»: más lluvioso de lo normal en zonas de la mitad occidental y más seco en el área mediterránea y archipiélagos.
Según estudios de Aemet, entre 1961 y 1993 llovió en invierno un 10 % más que entre 1994 y 2024, aunque no se puede «afirmar ni desmentir» que se deba al cambio climático.
El invierno fue, en su conjunto, normal con un valor de media sobre la España peninsular de 170,5 litros por metro cuadrado, lo que representa el 90 % del valor normal del trimestre en el periodo de referencia 1991-2020.
El invierno fue muy seco en Canarias
No obstante, en el Levante, puntos del Cantábrico y en el sur de Andalucía fue una estación entre seca y muy seca, mientras que en el archipiélago balear fue en general seco, y muy seco en Canarias.
Diciembre arrancó muy seco; enero, normal y febrero más lluvioso, y aunque las precipitaciones ayudaron a paliar en parte la sequía meteorológica en las cuencas del noroeste, sin embargo, al finalizar el invierno la escasez persistía en la vertiente mediterránea, puntos del Cantábrico y ambos archipiélagos.