Los acusados se encuentran en prisión preventiva desde octubre de 2023 tras el intento de homicidio
12 años de cárcel para dos hombres por intentar matar a un vecino con hacha y cuchillo
Vecinos de un barrio de Santa Úrsula (Tenerife) achacan a viejas rencillas entre los residentes en casas contiguas, el intento de homicidio de uno de ellos por parte de dos hermanos que están en prisión preventiva desde octubre de 2023.
Así se ha señalado durante la sesión del juicio iniciado este miércoles en la Audiencia Provincial, que se reanudará la próxima semana con la intervención de peritos y acusados, y con las conclusiones, aunque el fiscal solicita 12 años de cárcel para cada uno de los procesados y el pago conjunto de una indemnización de 28.100 euros.
La víctima limitó los desencuentros a que varias veces les llamó la atención por tirar piedras a los coches que pasaban por la autopista, y otra en la que mataron a un perro con un hacha, la misma arma con la que supuestamente le golpearon cuando tuvo lugar el ataque en el que también habrían usado un cuchillo o machete.
Relato de los hechos
Aquel día el hombre estaba solo en su casa cuando los hermanos golpearon en su puerta con fuerza y, una vez en el interior del patio, le habrían agredido gravemente usando también su bastón hasta el punto de que permaneció ingresado durante varios días sin poder declarar.
“En aquellos días estaba tomando pastillas y me encontraba tan débil que para acabar conmigo solo hacía falta un soplido”, dijo el hombre, que tiene reconocida un 87% de discapacidad, a lo que achaca que no pueda reconstruir con fidelidad lo ocurrido, “sólo sé que iban a matarme”.
Recuerda que se levantó del suelo como pudo y arrastrándose consiguió llegar a la puerta principal, que sus vecinos intentaron también derribar aunque en ese momento había llamado a la policía pese a que en hasta tres ocasiones perdió el conocimiento, mientras los acusados seguían lanzando insultos y amenazas.
Los vecinos conocían sus desavenencias
Los vecinos que oyeron el alboroto y acudieron a auxiliar al agredido relatan que consiguieron arrebatarle el hacha a uno de los hermanos, que ambos estaban “fuera de sí” y rompían lo que encontraban a su paso, como muebles y una moto.
En el barrio se conocían sus desavenencias por las fiestas y alborotos que organizaban los acusados, pero hasta entonces los desencuentros no habían pasado de insultos.
También coincidieron en que aquel día uno de ellos desprendía un fuerte olor a alcohol y era conocido que otro “está un poco mal de la cabeza”, y recuerdan que además de insultos y amenazas les oyeron decir, “ya no vas a volver a mirarnos mal nunca más”.
La policía no sabía si la víctima seguía con vida
El relato de los agentes de las policías local, nacional y guardia civil fue bastante coincidente. Los primeros en llegar creyeron que se trataba de una pelea entre los hermanos, pero luego les informaron que había una víctima dentro de la casa, y al entrar encontraron un reguero de sangre.
El hombre presentaba heridas, entre ellas una brecha en el cuello que, según una policía, le llamó tanto la atención hasta el punto de “no saber cómo todavía estaba vivo” y además se encontraba “totalmente aturdido”.
El hombre reclama que 5.600 euros por los daños causados en la moto que tenía en el patio y en la puerta y las heridas causadas, mientras que el Servicio Canario de la Salud pide 16.500 y la Fiscalía que se les imponga una multa de 6.000 euros. Como penas accesorias el Ministerio Público solicita la prohibición de residir en Santa Úrsula durante 8 años, órdenes de alejamiento y de comunicarse con la víctima tras salir de prisión en caso de haya condena.
