La formación morada confía en que la enmienda a la reforma de la ley registrada en el Congreso lleve a reflexionar al PSOE
Unidas Podemos ha registrado este lunes enmiendas para la reforma de la ley del «solo sí es sí» y confía en que el PSOE «reflexione» y apoye las enmiendas, en línea con las que también han presentado ERC y Bildu. La formación morada asegura que las propuestas evitan retroceder y «degradar el sistema del consentimiento».
Mientras que la proposición de ley socialista introduce un tipo agravado para el delito de agresión sexual cuando éste se produzca con violencia o intimidación, Unidas Podemos propone que la violencia o la intimidación sean circunstancias agravantes y definir la agresión sexual únicamente sobre la base de la falta de consentimiento.
Justicia alertó de que el sistema propuesto por Igualdad y Podemos podría dar lugar a penas desproporcionadas y optó por presentar en solitario su propuesta de reforma, pero Unidas Podemos insiste en que la iniciativa del PSOE supone volver al esquema anterior.
«Es mucho mejor modular la aplicación de la ley con agravantes que volviendo al anterior sistema, que trajo mucho dolor, mucho sufrimiento y muy poca justicia a las mujeres», ha asegurado en declaraciones a los periodistas en el Congreso la delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell.
Piden «reflexión» al PSOE
A su juicio, que la portavoz del PP, Cuca Gamarra, dijera en la reforma socialista era una enmienda a la totalidad a la ley del «solo sí es sí» y que ahora los grupos de la mayoría «progresista y feminista» del Congreso coincidan con la posición de Igualdad debería hacer reflexionar al PSOE.
«No es casualidad que la mayoría feminista coincidamos en que la solución no es ese subtipo, sino este agravante»; «No hace falta ese retroceso que pretende el PP para mejorar la aplicación de la ley en los tribunales y dar más seguridad jurídica a las mujeres».
Según ha explicado, hubo negociaciones con el PSOE hasta el 8 de diciembre, pero «Justicia se levantó de la mesa».
Rosell cree que se trata de «diferencias técnicas» que «no son de gran calado, pero que sí tiene mucha incidencia en el sistema», y confía en que, aunque en no fue posible en las pasadas negociaciones, ahora se pueda llegar a un acuerdo.
«Hemos intentado el acuerdo hasta el final, estamos dispuesto siempre a sentarnos», ha afirmado.
Revisión de condenas
La ley del «solo sí es sí» llevó a revisar a la baja centenares de condenas a agresores sexuales al rebajar algunas penas mínimas e incluyó como circunstancia agravante que la agresión estuviera precedida o acompañada «de una violencia de extrema gravedad o de actos que revistan un carácter particularmente degradante o vejatorio».
La propuesta de Unida Podemos reformula esa circunstancia agravante y eleva las penas cuando para cometer la agresión «se hubiera empleado violencia o intimidación, o la misma vaya acompañada de actos que revistan un carácter particularmente degradante o vejatorio», sin perjuicio de que los actos de violencia puedan castigarse adicionalmente.