Además del control a los turistas, el Gobierno emprenderá acciones de concienciación para la vacunación entre la población de 20 a 49 años
El Gobierno de Canarias se plantea introducir «medidas adicionales» de control covid a los turistas extranjeros que viajen al archipiélago si se detecta un incremento de los casos importados, algo sobre lo que, por el momento, «no hay pruebas contundentes».
Así lo ha anunciado al término de la reunión del Consejo del Gobierno de Canarias el viceconsejero de la Presidencia, Antonio Olivera. También ha avanzado acciones de concienciación para completar la pauta de vacunación entre la población canaria de 20 a 49 años, donde más estancadas están las cifras y con la que están «muy vinculados» los repuntes de contagios de los últimos días.
Antonio Olivera ha indicado que Canarias lleva unos meses de evolución de la actividad turística «muy intensa» y eso es bueno desde el punto de vista económico. Pero preocupa la posibilidad de que «el mal comportamiento» epidemiológico en los países emisores, fundamentalmente Reino Unido y Alemania, acabe repercutiendo en el archipiélago.
Por eso, el ejecutivo canario estará «muy pendiente» de la evolución de los contagios. También de un posible aumento de los casos importados para ver si resultan necesarias medidas de control más allá de las existentes.
Fomento de la vacunación entre la población de 20 a 49 años
En cuanto al fomento de la vacunación entre la población de 20 a 49 años, el viceconsejero de Presidencia ha reconocido que «el rango de instrumentos» jurídicos disponible «no es todo lo extenso que nos gustaría», pues no permite medidas «impositivas«, y que por eso se están estudiando «diferentes opciones» para la concienciación ciudadana.
En vista del empeoramiento de las cifras de los últimos días, en los que se vienen rozando los 200 nuevos contagios, ha recalcado que «se hace de nuevo imprescindible volver a recordar que no nos podemos relajar. El virus sigue estando muy presente en el conjunto de la sociedad».
Ya hay «una primera consecuencia», el paso de Fuerteventura del nivel de alerta 1 al 2, ha dicho Antonio Olivera. Ha añadido que «si las otras islas no cambian trayectoria pueden verse en una situación similar en próximas semanas».
«No somos alarmistas pero no podemos despistarnos»
Olivera ha hecho hincapié asimismo en que «éste es el escenario de riesgo en el que nos movemos. No somos alarmistas, no es la misma situación que en el pasado (…) pero no podemos despistarnos ante el riesgo vigente».
También el viceconsejero de Presidencia ha recalcado que «no es voluntad del Gobierno de Canarias prohibir la celebración de eventos», como las Navidades o los Carnavales, pero sí tiene «la obligación» de que se desarrollen «con las debidas prudencias y las condiciones de seguridad sanitaria».
Y en ello, ha dicho Olivera, «trabajamos con la Fecam para ver cómo las fiestas pueden ser lo más parecido posible a la normalidad». «Pero teniendo en cuenta el riesgo vigente», añadió.
Además, ha indicado que el Gobierno canario está a expensas de que el consejo interterritorial de Sanidad marque unas pautas, recomendaciones, homogéneas para toda España.