El proyecto pretende que los canes rastrean desde el pasado mes de agosto la mercancía que llega a Mercalaspalmas
El proyecto ‘#stopculebrareal’ incorporó una unidad canina contra especies exóticas invasoras con dos perros, Russel y Mamba. Un pastor belga malinois y un cruce de labrador y golden retriever, respectivamente.
Así lo informó la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial de Canarias, que agrega que esta acción se ha realizado a través de Gesplan y en coordinación con el Cabildo de Gran Canaria.
Por su parte, los canes rastrean desde el pasado mes de agosto la mercancía que llega a Mercalaspalmas, principal centro logístico de distribución de productos agroalimentarios de Gran Canaria.
El proyecto para paralizar a la culebra de California
Al respecto, el consejero del Área, José Antonio Valbuena, remarcó que «el pasado año a través del proyecto #stopculebrareal se capturaron en toda Gran Canaria un total de 2.675 ejemplares de culebra de California, de los cuales 1.686 fueron capturados por el personal del proyecto y 989 gracias a avisos de la ciudadanía».
Sobre el trabajo desarrollado en Mercalaspalmas, explicó que se lleva a cabo el protocolo establecido y, afortunadamente, no se ha detectado ninguna serpiente en estas instalaciones.
Mientras, la consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, María Inés Jiménez, hizo hincapié en la importancia de la colaboración ciudadana en este proyecto para alertar de la aparición de este tipo de animales invasores que, aunque son inofensivos para los humanos, consumen principalmente reptiles endémicos.
Forma de actuación
Se ha establecido un protocolo de actuación específico de búsqueda activa para el trabajo en las instalaciones de dicho establecimiento. El principal objetivo es evitar que algunos ejemplares de culebra real de California entren como polizones a las instalaciones, por lo que se decidió operar en la entrada del recinto en el horario en el que entran camiones con mercancías.
Mientras, el conductor del vehículo presenta la documentación necesaria para acceder a Mercalaspalmas, se realiza la inspección por parte de la unidad canina. El guía con uno de los perros, alrededor del camión con el motor apagado. Además, de forma complementaria, se instalaron dentro del recinto varias trampas de doble embudo.
Para estar preparados, los entrenamientos de los canes se desarrollando simulando situaciones diversas, ubicando al animal en lugares tales como el interior de vehículos, en maletas, cajas, naves industriales e incluso dentro de las casas.
Durante el pasado año, la unidad canina destinó un total de 1.049 horas a labores de adiestramiento, 206 a la búsqueda activa, 120 al adiestramiento en un entorno natural y 104 a la formación.