La periodista afgana Khadiya Amin traslada su experiencia tras huir de su país en 2021, con el regreso de los talibanes. Ha sido la invitada de esta semana en el espacio de igualdad de Buenos Días Canarias.
La vida de Khadiya Amin dio un giro de 180 grados el 15 de agosto de 2021. Ese día, en maquillaje, recuerda que habló con sus compañeras de que «algún día presentarían las noticias sin velo». Horas después, tras presentar los informativos del mediodía de la televisión pública de su país, todo cambió. Por la tarde, los talibanes irrumpieron en el canal y anunciaron su vuelta al poder. Desde entonces, las mujeres de Afganistán han empezado a ser borradas de los espacios públicos y a ser silenciadas.
Hace 3 años que Khadiya llegó a España y ahora recorre el país alzando la voz por las mujeres afganas, a las que ya no se permite ni hablar ni estudiar pasados los 12 años. En Canarias, ha participado en el festival Periplo de Literatura y Viajes, celebrado en el Puerto de la Cruz.
Khadiya ha afirmado que en su país fue forzada a casarse y que sufrió maltrato psicológico y físico. Ahora considera que tiene la posibilidad de viajar y dar visibilidad a las mujeres afganas, aunque reconoce que es un desgaste emocional enorme. Su motivación es enseñar al mundo cómo todos los derechos les fueron arrebatados a las mujeres.
Apartheid de género
Khadiya Amin ha afirmado que la comunidad internacional ha olvidado lo que está pasando en su país. Recuerda que desde el retorno de los talibanes, han aumentado los matrimonios forzosos, sobre todo infantiles, los casos de maltrato y de mujeres que no pueden con la presión y se acaban quitando la vida. Insiste en que quieren que se reconozca el Apartheid de género como un crimen de lesa humanidad.
Precisamente, esa reclamación se abordó también en el Tribunal de los Pueblos celebrado en Madrid hace unos días, con participación de víctimas. Khadiya asegura que pudo escuchar el testimonio de otras mujeres encarceladas. Cree que este tribunal no va a cambiar gran cosa, pero sí cree que servirá para documentar todos los casos y hacerlos llegar a la Corte Penal Internacional.