Se cumplen 20 años del primer gran momento histórico del siglo XXI. Tras el ataque a las Torres Gemelas el mundo inició unos cambios geopolíticos que aún vivimos
El 11 de septiembre de 2001 se producía uno de los ataques terroristas más brutales en occidente. El ataque a las Torres Gemelas, en pleno centro de Nueva York, y al Pentágono, con el secuestro de aviones comerciales con los que cometerían los impactos, dejó al mundo en un enorme colapso emocional. Ese día cambió el mundo.
La reciente salida de los ejércitos occidentales de Afganistán, tras hacer lo propio en Irak y Siria, o el ascenso de China como potencia mundial, son algunas consecuencias del 11S.
Cuando una enorme bolsa de humo provocó aún más pánico en ese Nueva York aterrorizado por el ataque a sus torres más emblemáticas, pocos imaginaban que 20 años después el mundo seguiría asfixiado por sus efectos.
Y aunque gran parte del mundo no entendió aquellas invasiones, solo he tiempo ha demostrado que de poco sirvieron.
La imagen de aquel 11 de septiembre de hace 20 años define ese cambio de visión.
China se ha convertido en el nuevo gran poder que se enfrenta Estados Unidos.
Pero tras este juego de potencias quedaron los de siempre. Los millones de muertos sin nombre, los millones de refugiados, países destruidos como Irak o Afganistán, que terminaron siendo llamados simple, e inhumanamente, daños colaterales.