En Gran Canaria, un peluquero afincado en Telde ha transformado una inusual llamada de teléfono en un nuevo proyecto de negocio social
Se trata de un servicios de peluquería a domicilio para personas con movilidad reducida y discapacidad.
En Gran Canaria, un peluquero afincado en Telde ha transformado una inusual llamada de teléfono en un nuevo proyecto de negocio social. Se trata de un servicios de peluquería a domicilio para personas con movilidad reducida y discapacidad.
Juan Pablo Mena Fajardo recibe varias llamadas al día para solicitarle un servicio de peluquería a domicilio. Todo comenzó hace cuatro meses con la llamada de una clienta que no podía ir a su salón.
«Había llamado a muchas barberías y todas les decían que no les prestaban el servicio, que no era problema suyo. Y dije, pues mira, vamos a cubrir esta necesidad de las personas que no pueden salir de su casa con problemas de movilidad reducida, personas mayores o niños con TEA«, explica Juan Pablo Mena Fajardo, de Cuidalook.

Clientes como Marcial y Sole
Marcial y su mujer Sole son sus clientes desde hace meses. Antes para ellos ir a la peluquería era todo un reto, ya no. «Yo voy en silla de ruedas, y entonces no es lo mismo tener un peluquero a domicilio en mi casa, va a tener que ir yo a la empresa. Cada vez que me de la carrera al pelo, yo le pego una llamadita y aquí lo tengo hecho», cuenta Marcial.
Por su parte, Sole señala que «tenía que esperar, pedir visitas, pedir horas, hacer todo. Aquí es como si fuera de la familia, porque todo el trabajo lo hace bien».
En Canarias más del 10% de la población mayor de 65 años se enfrenta a limitaciones severas de desplazamiento.