Estrellas como Jokic o Wagner destacan mientras que Francia disputará el torneo con múltiples bajas
A las puertas del inicio del Eurobasket 2025, la selección de Serbia, liderada por Nikola Jokic, tres veces nombrado Mejor Jugador de la NBA, se postula como la gran favorita ante otros equipos como Alemania, campeona del mundo; Francia, subcampeona olímpica o Grecia, con Giannis Antetokounmpo a la cabeza.

Después de dominar la liga estadounidense y recibir tres veces el MVP, Nikola Jokic buscará ganar su primer gran torneo con la selección de Serbia, entrenada por Svetislav Pesic, que todavía no ha levantado ningún campeonato europeo desde la disolución de la República Federal de Yugolsavia en 2003.
Análisis de las favoritas
Según la clasificación FIBA, Serbia es la principal favorita para este torneo, seguida de Alemania, sumida en un nuevo proyecto bajo la batuta de Álex Mumbrú en el banquillo, mismo caso que Francia, tercera en las apuestas, con Frédéric Fauthoux como sustituto de Vincent Collet, seleccionador desde 2009 hasta 2024.
Alemania, ganadora del pasado campeonato del mundo, promete volver a dar pelea liderada por sus dos grandes estrellas, los exteriores Dennis Schröeder y Franz Wagner, y un plantel de jugadores que conforman los principales equipos europeos.
Por su parte, Francia acude a este Europeo con multitud de bajas, especialmente en el juego interior, sin Rudy Gobert, Victor Wembanyama, Mathias Lessort ni Vincent Poirier, pero con varios clásicos del baloncesto europeo y con una combinación casi única de físico y talento en su plantilla.
El nuevo talento que conforma al equipo francés destaca ya en las máximas categorías europeas y en la principal liga estadounidense, la NBA, con jóvenes estrellas como Bilal Coulibaly, Zaccharie Risacher o Alexandre Sarr.
Por su parte, Grecia tratará de recuperar el terreno perdido estos años a través de su máxima estrella, Giannis Antetokounmpo, MVP de la NBA en 2019 y 2020 que, al igual que Jokic, busca extender su superioridad con su primer gran título FIBA con su selección nacional.
Este mismo título lo consiguió Luka Doncic con Eslovenia en 2017, que a pesar de contar con varias bajas, tratará de volver a dar la sorpresa en esta edición. La estrella balcánica busca redimirse tras un sorprendente cambio físico que ya movilizó a los aficionados de este deporte en las redes.

Otros equipos a tener en cuenta para el torneo
Por otro lado, España, que defenderá título en el último torneo de Sergio Scariolo en el banquillo, buscará con un equipo joven y sin grandes referentes alzarse con el torneo, después de un ciclo ganador histórico cimentado en leyendas del baloncesto europeo como Pau y Marc Gasol.
Asimismo, selecciones como Lituania, Turquía, Letonia o Italia se postulan como los candidatos a ser la sorpresa de esta edición, que se celebra del 27 de agosto al 14 de septiembre en cuatro países, Chipre, Finlandia, Polonia y Letonia.
Lituania, sin su principal estrella, Domantas Sabonis, confiará en la experiencia de Jonas Valanciunas en la posición interior para tratar de asestar un golpe en este campeonato. La calidad del equipo báltico siempre reluce en torneos de este calibre.
En la misma coyuntura se encuentra la Turquía de Alperen Sengün, jugador de los Houston Rockets. A sus 23 años, el pívot regresa con su país después de ser el líder indiscutible del equipo en el Eurobasket de 2022, que cayó ante Francia en octavos de final, y en el que promedió 16,8 puntos y 8,2 rebotes por partido.
Por último, la selección de Letonia, una de las anfitrionas del torneo, se encomendará una vez más al bloque liderado por Kristaps Porzingis, otro pívot sobrado de calidad pero castigado durante esta última temporada por lesiones y contratiempos, para tratar de hacer efectivo el factor público, y repetir las sensaciones de la pasada Copa del mundo, en la que finalizaron en un gran quinto puesto.