
La Palma vive este lunes por la noche uno de su actos más mágicos para los niños y niñas: la Pandorga. Anuncia la llegada de la Virgen y es el símbolo de la ilusión infantil en cada Bajada
- Tres generaciones sin vivir la Bajada de La Palma
- La Palma presenta la medalla de la Virgen de las Nieves
- Especial de RTVC de la Bajada de la Virgen de las Nieves
- Galería de imágenes de la Bajada 2025
- Historia de la Bajada de la Virgen de las Nieves
- El misterio de los enanos de La Palma
- El Minué, el baile parisino de La Palma
- La Virgen de Las Nieves visitará todos los municipios de La Palma
La noche del lunes de Semana Grande es una de las más esperadas en La Palma. Se calcula que unas 700 personas participen de La Pandorga, la fiesta de los niños y niñas de la isla. Después de mese de confección, los nervios están a flor de piel para los pandorgueros, que portarán farolillos con velas que se quemarán al final del desfile. Hacemos un repaso a su historia y recorrido.
Qué es una pandorga
Las pandorgas son estructuras de madera que después toman forma con papeles de colores. «Las estructuras las hace una carpintería del Ayuntamiento y después los voluntarios se encargan de forrarlas y otros a decorarlas», explica Manuel Antonio San Blas, uno de los pandorgueros que lleva participando desde niño en esta tradición.
La Pandorga comenzó en un año de Bajada del siglo XIX, concretamente en el año 1830. En su origen, alude a una «junta de instrumentos ruidosos», usada en el siglo XVIII para referirse a espectáculos callejeros con luz y música. Después de confeccionarlas, se llevan en un desfile nocturno que ilumina la Semana Grande.

La tradición continúa gracias al compromiso de personas como San Blas, que de forma voluntaria organizan muchos meses antes todo para que esté listo en la noche del desfile. «Los más viejitos como yo nos encargamos de organizar reuniones para pedir voluntarios y dividirlos porque a unos se les da mejor empapelar, a otros decorar...», explica. Y gracia a esa labor altruista siguen disfrutando de una imagen única y con casi dos siglos de historia.
Hoy, la tradición sigue bastante fiel a lo que era en su origen con estructuras e itinerario parecidos, solo van evolucionando los motivos elegidos, que se adaptan a los gustos de cada año. El desfile comienza este año en la Avenida del Puente y sigue por la trasera del Cabildo, la calle Real y llega hasta el barranco, donde se queman las pandorgas.

La noche de los niños
Esta fiesta está hecha para los más pequeños, pero también por ellos. «Cada vez participan más niños, pero no solo en el desfile, sino también en la confección», explica orgulloso San Blas.
«Hasta que no lo vean y lo vivan no sabrá lo que es por más que se lo expliques», dice en relación a los cientos de niños que este lunes vivirán por primera vez esta tradición.
Será a las 21:30 horas. «A veces hablamos como si hubiese sido el año pasado y claro, han pasado cinco años, esta vez han pasado 10 años y la vivo como cuando tenia 15«, reconoce el pandorguero.
