Las instalaciones eléctricas de emergencia en Tenerife estarán ubicadas en los polígonos de La Campana, en Santa Cruz de Tenerife, y en Granadilla de Abona, en el sur de la isla
El Consejo de Gobierno ha aprobado este viernes la modificación de los planeamientos para dos instalaciones de energía en Tenerife con el objetivo de evitar nuevos ceros energéticos en la isla.
El portavoz del Ejecutivo canario, Alfonso Cabello, ha detallado que las dos instalaciones estarán ubicadas en el polígono industrial de La Campana, en El Rosario, con 9 MW de potencia, y una segunda instalación en el polígono de Granadilla de Abona, en el sur de la isla, de 14,8 MW.
Con esta acción, el Ejecutivo avanza en la implantación de infraestructuras de emergencia destinadas a aportar capacidad de respaldo en momentos críticos del sistema y a evitar apagones en los principales núcleos de población, en caso de producirse.

Estos proyectos forman parte de las 10 instalaciones de emergencia energética que se instalarán en Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura en puntos críticos del sistema para cubrir el déficit actual y garantizar la respuesta ante posibles apagones en la situación de emergencia energética actual.
La decisión se suma al conjunto de medidas adoptadas desde el inicio de la emergencia energética, que incluyen proyectos similares en otras islas, la mejora de interconexiones eléctricas, el impulso al almacenamiento y la planificación de nuevas infraestructuras renovables. Todo ello con el objetivo de dotar a Canarias de un sistema eléctrico más seguro, estable y resiliente.
Los proyectos en detalle
La planta de emergencia La Campana, situada en el municipio de Santa Cruz de Tenerife, estará compuesta por cinco grupos de generación de 1,8 MW cada uno, hasta alcanzar una potencia total de 9 MW. Los equipos se alojan en contenedores de 40 pies con aislamiento acústico e incluyen centros de transformación conectados a una subestación que eleva la tensión hasta los 20 kV.
El proyecto, de carácter provisional, está diseñado para un montaje y desmontaje ágil. Supone una inversión de 5,5 millones de euros que será asumida por la empresa Sampol. La evacuación de la electricidad se realizará mediante una línea subterránea de unos 200 metros de longitud hasta la subestación de distribución de Endesa denominada El Chorrillo.
Por su parte, la planta de emergencia de Los Abrigos, en Granadilla de Abona, contempla la instalación de ocho grupos de generación de 1,8 MW cada uno, alcanzando un total de 14,8 MW de potencia eléctrica. Al igual que en el caso anterior, los equipos se alojan en contenedores de 40 pies con aislamiento acústico y disponen de centros de transformación que elevan la tensión hasta los 66 kV.
25 millones de inversión
La inversión prevista asciende a 25,1 millones de euros, a cargo de la empresa DISA. La evacuación de la electricidad se efectuará a través de una línea subterránea de unos 300 metros hasta la subestación de transporte de Red Eléctrica de España denominada Granadilla.
En ambos casos, los grupos de generación cumplen con la estricta normativa de emisiones aplicable a este tipo de instalaciones, incorporando un sistema de reducción catalítica selectiva (SCR).
Ambas instalaciones, en emplazamientos de suelo industrial, se suman a las actuaciones ya en curso en distintas islas y refuerzan el dispositivo global de emergencia energética diseñado por el Gobierno de Canarias junto al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
Dos medidas para avanzar en la emergencia energética en Canarias
Estos dos proyectos forman parte de las 10 instalaciones de emergencia energética que el Gobierno de Canarias ha anunciado para todo el archipiélago, distribuidos estratégicamente entre Tenerife, Gran Canaria y Fuerteventura para cubrir puntos críticos del sistema insular y garantizar la respuesta ante eventualidades. Lo que dará una cobertura total del 90% del déficit total que existe, que ha sido notificado por el operador del sistema (Red Ecléctica) por un total de 268 MW de potencia.
Estas plantas de respaldo se complementan con otras actuaciones en marcha, como el refuerzo de interconexiones eléctricas, como la actualmente en proceso entre Tenerife y La Gomera, el impulso de proyectos de almacenamiento energético como los avances en Salto de Chira o la planificación de nuevas infraestructuras renovables, en línea con los objetivos de descarbonización y transición energética marcados para Canarias.