La organización destaca la precariedad habitacional en circunstancias «impensables hace años» en Canarias
Cáritas Diocesana de Canarias alerta de un auge de la precariedad habitacional «impensable hace años» en Canarias, que se constata con el aumento de peticiones de ayudas para pagar el alquiler de un hogar en la provincia de Las Palmas, incluso de personas que no tienen acceso a una vivienda digna con el salario que perciben» pese a tener empleo.

Organización donde en los últimos años «el área de vivienda es la que tiene más consumo de recursos», hasta el punto de que destina «prácticamente el 40 % de todos» los disponibles, cuando tradicionalmente su peso era bastante menor en sus presupuestos, ha dicho este martes el director de Cáritas Diocesana de Canarias, Gustavo Nuez.
Quien ha destacado la tendencia al alza del problema, apuntando, aunque sin dar cifras precisas, que el aumento de peticionarios de ayudas para poder mantenerse bajo un techo es cada vez más grande y que este año está siendo más notable que en el anterior, señalando, como prueba de ello que «solo hasta agosto» la ONG «ya ha atendido a más personas que en todo 2024».
Gustavo Nuez ha hecho estas declaraciones a preguntas de periodistas tras participar en un acto en el que la compañía de guaguas interurbanas de Gran Canaria, Global, repartió 25.231 kilos de comida recogidos en su campaña ‘La guagua de las promesas’, que organiza en torno a la festividad insular de la Virgen del Pino, entre Cruz Roja, el Banco de Alimentos y Cáritas.
25 toneladas de alimentos
Esta iniciativa, por la que Global recoge a través de las redes sociales promesas que deseen ofrecer a la patrona de Gran Canaria con motivo de la peregrinación anual en su honor ciudadanos que no puedan ir a su templo de Teror en persona y las lleva en su nombre, donando un kilo de comida a gentes necesitadas por cada uno de ellos, solo resuelve una parte de las carencias existentes, ha advertido.
Porque, incluso habiéndose logrado este año «una cifra récord», al recabar más de 4.000 promesas, que la empresa transportista tradujo en otros tantos kilos de comida, y multiplicar luego por seis esa cifra con ayuda de empresas colaboradoras de la campaña, hasta superar las 25 toneladas, según ha destacado el director general de Global, Víctor Quintana, «todas las donaciones son pocas», al entender de Cáritas.
Su función «no solamente es dar de comer, sino también ayudas para socorrer nuevas tipologías de pobreza», que afectan a «trabajadores a los que no les da para tener lo que entendemos como una vida normalizada» con el sueldo que perciben, ha dicho su director.
Y ha recalcado que también ha ido cambiando el perfil de afectados, porque tanto en 2024, cuando su organización auxilió a 22.500 personas y a 7.500 hogares en Las Palmas, como en este 2025, han ganado peso «las familias monomarentales que no solo tienen hijos a su cargo, sino también personas mayores, dependientes«.