La ciudad tinerfeña es una de las más visitadas del archipiélago y la única que se ha proclamado Patrimonio de la Humanidad
San Cristóbal de La Laguna, municipio de Tenerife, busca limitar el impacto de los grandes grupos turísticos que llegan a la ciudad procedentes, sobre todo, de cruceros. La propuesta sería limitar los grupos a 30 personas y eliminar la gratuidad de las visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento.
Esta localidad tinerfeña es la única ciudad considerada Patrimonio de la Humanidad de Canarias y también una de las más visitadas de todo el archipiélago. Por estas concesiones, la institución municipal busca luchar contra el turismo masivo.
Limitar los grupos y cobrar las visitas
La propuesta de limitar a grupos de entre 25 y 30 personas para mitigar el impacto en la vida cotidiana de los vecinos gana fuerza en el municipio y busca evitar situaciones de mucho tránsito generadas por la visita de cruceristas.
“Con una ordenanza donde detallamos qué personas pueden venir por grupo para no generar esa sensación de agobio muchas veces entre los residentes y los visitantes”, afirmó Estefanía Díaz, concejala de Turismo de San Cristóbal de La Laguna.
“En las primeras horas del día se genera una incomodidad entre estos cruceristas que vienen muy temprano cuando la ciudad todavía está cerrada y también se solapan con los camiones, furgonetas que acceden en ese momento, en ese tramo horario”, añadió.
El consistorio plantea para el próximo año cobrar por las visitas guiadas que organiza el Ayuntamiento y destinar los fondos al cuidado del casco histórico.
“Será un precio simbólico pero que luego se verá repercutido en el mantenimiento del municipio”, aseguró Díaz a RTVC.


