La Policía Local no constató daños personales ni materiales aunque la gente asustada salió a la calle en plena noche.
Tres terremotos prácticamente consecutivos de magnitud 4,3, 4,2 y 4 y epicentro en municipios del área metropolitana de Granada se dejaron sentir anoche en las zonas afectadas tres días después del temblor de 4,4 grados que sacudió, con daños materiales, Atarfe y Santa Fe.
El primero de ellos, de 4,3 grados y epicentro en Santa Fe, se registró a las 22.36 horas (hora local) y, poco después, a las 22.44 horas, se detectó otro de 4,2 y epicentro en Cúllar Vega, también en el área metropolitana de Granada, ambos muy superficiales -cero kilómetros de profundidad-, lo que contribuyó a que el temblor fuese sentido con intensidad por la población.
El tercero, con epicentro en Santa Fe, se registrado a las 22.54 horas y, al igual que los anteriores, con una profundidad de cero kilómetros, mientras que ya a las 23.09 horas se detectó un cuarto seísmo en Santa Fe pero de menor magnitud -2,7-.
En Granada capital, donde se dejó sentir, la Policía Local informó de que no hubo daños personales ni materiales aunque sí gente asustada que salió a la calle. El acalde, Luis Salvador, pidió en su cuenta de Twitter precaución con las chimeneas de los edificios o cualquier objeto que pudiera caer a la calle.
En Santa Fe, según la Policía Local, solo hubo constancia de la caída de parte de la fachada de una vivienda desocupada del casco histórico que estaba en estado ruinoso, lo que obligó a desalojar, por precaución, a los inquilinos de la vivienda de enfrente.
Al igual que en Granada, hubo gente que optó por salir a la calle en busca de espacios abiertos, mientras que en otros municipios como Atarfe tampoco hubo constancia de daños personales ni materiales.
Según la Junta de Andalucía, Granada ha pasado a fase de pre-emergencia del Plan de Emergencia Ante el Riesgo Sísmico, nivel que se caracteriza por el seguimiento instrumental y estudio del fenómeno además de por medidas de información a órganos, autoridades y población.
Fue el sábado pasado cuando se produjo el seísmo de mayor magnitud, con 4,4 grados en la escala Richter y epicentro en Santa Fe (Granada), y desde entonces se han sucedido hasta cerca de 200 réplicas aunque de menor intensidad salvo los de esta noche.
El del sábado pasado, considerado de momento el de mayor magnitud de esta serie sísmica, llegó a sumar más de medio millar de incidencias menores en Atarfe y Santa Fe, fundamentalmente por caída de cascotes y azulejos en viviendas y calles, y un herido leve.
El Instituto Andaluz de Geofísica y Prevención de desastres sísmicos de la Universidad de Granada ha achacado los terremotos de los últimos días al hundimiento que sufre la Cuenca de Granada, en cuyo borde se encuentran las fallas que los causan, y los ha incluido en una serie que comenzó «hace tiempo».
Los expertos consideran estos terremotos «pequeños», ni siquiera moderados, aunque reconocen que causan una gran alarma social al ser muy superficiales y producirse cerca de localidades que están densamente pobladas.
Por su parte, investigadores del departamento de Geodinámica de la Universidad de Granada y del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra los han atribuido este martes a la aproximación continua de 4 a 5 milímetros al año entre las placas eurasiática y africana.
