El problema de la accesibilidad en algunas zonas de Anaga, en Tenerife, es alarmante. El Ayuntamiento asegura que no puede hacer nada por la privacidad y situación del suelo
La accesibilidad es uno de los problemas históricos que tienen los diferentes núcleos poblacionales de Anaga, en Tenerife. Los vecinos demandan a las instituciones la mejora de los caminos para acceder a sus domicilios con más facilidad. Un acceso necesario tanto para ellos mismos, como para los servicios de emergencia, en caso de urgencia.
Ese ha sido el caso de Carmelo Álvarez, vecino de El Regente, que ha tenido que ser rescatado con gran dificultad de su domicilio de una forma poco convencional.
Desde 2017, los residentes de la parte alta de San Andrés exigen la rehabilitación de un camino para la mejora de la accesibilidad. Sin embargo, el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife asegura que no puede realizar actuaciones en el entorno debido a que se trata de un camino privado y forma parte del Parque Rural de Anaga.
A este respecto, Inmaculada Fuentes, concejala del Distrito de Anaga, ha explicado que «el suelo no es municipal». Aunque, también apunta que, en las complicaciones burocráticas «también tiene que ver la parte rural, ya que el suelo puede ser moderado o trasversal«.
Por otro lado, en el municipio de Valle Grande, en el barrio de María Jiménez, se vive una situación muy similar desde hace muchos años. No obstante, en 2021 y tras múltiples quejas, los vecinos consiguieron que el Cabildo hormigonara el camino y colocara una barandilla.
En este sentido, Esteban Nuñez, vecino de Valle Grande, alaba el trabajo realizado allí y cuenta que «antes no se podía ni pasar por el camino de acceso a la zona». Describe la vía de acceso como una «vereda muy pequeña» que llegaba a tener «entre 10 y 20 centímetros en algunas zonas» de paso.
Ambos son pequeños núcleos poblacionales en entornos naturales que reclaman tener los mismos derechos que otros espacios de la isla.