La ciudad de Al Fasher se encuentra en manos de paramilitares y han matado al menos 460 personas
El Gobierno español condenó este miércoles las violaciones de los derechos humanos en la ciudad sudanesa de Al Fasher, en manos de paramilitares, y exigió «el acceso incondicional» a la ayuda humanitaria con corredores que permitan la salida de la población.
El Ministerio español de Asuntos Exteriores sigue «con gran preocupación los últimos acontecimientos» en Al Fasher y reitera que condena las violaciones de derechos humanos que «según múltiples testimonios están cometiendo las Fuerzas de Apoyo Rápido y sus aliados», indicó en un comunicado.
Asesinatos por motivos étnicos
Desde que los paramilitares anunciaron el domingo la toma de la ciudad sudanesa, que asediaban y atacaban a diario desde mayo de 2024, organizaciones y medios sudaneses denunciaron asesinatos por motivos étnicos en la ciudad.
Las Fuerzas Conjuntas de Sudán, una alianza del Ejército y grupos armados, acusaron este pasado martes a los paramilitares sudaneses de matar a «más de 2.000 civiles desarmados», la mayoría mujeres y niños, entre este domingo y el lunes durante la captura de Al Fasher, una cifra que no ha podido ser verificada por una fuente independiente.
Entre esas víctimas figuran más de 460 pacientes y acompañantes asesinados en un ataque al Hospital Materno Saudí de Al Fasher, según denunció este miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Peor crisis humanitaria del mundo
El Gobierno español exige el respeto al derecho internacional humanitario, la protección de la población y su seguridad y el acceso de la ayuda humanitaria en la ciudad ante la escalada de la violencia.
Además, insisten en «la necesidad urgente» de poner fin a la guerra en Sudán con la negociación como única vía de solución y «en la defensa de la unidad e integridad territorial del país».
Asimismo, el Ejecutivo traslada su apoyo a la labor que está llevando a cabo la iniciativa diplomática el Quad -formada por Estados Unidos, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Egipto- y la Unión Africana.
La guerra en Sudán, iniciada en abril de 2023, ha causado decenas de miles de muertes, ha obligado a más de trece millones de personas a huir de sus hogares y ha convertido al país en el escenario de la peor crisis humanitaria del planeta, ya que la mitad de la población se enfrenta a una inseguridad alimentaria grave, según la ONU.


