Dos tiburones martillo han sido vistos esta semana en la playa de Patalavaca, en Gran Canaria
Los bañistas de la playa de Patalavaca, en el sur de Gran Canaria, avistaron la semana pasada en varias ocasiones dos tiburones martillo. Se trata de una especie que es habitual en aguas canarias y que se encuentra en régimen de protección especial. Además, desde este 2023, el reglamento europeo de pesca prohíbe también su captura.
Aunque lo recomendable es alejarse en caso de ver uno, no son especialmente agresivos. De hecho, no hay registrado ningún ataque a humanos en Canarias.
Asier Furundarena, ecólogo marino, asegura que son animales bastante «huidizos» y que «no hay que tenerles miedo». Lo realmente malo sería tener un «océano sin tiburones», explica, ya que son «depredadores tope que contribuyen a regular los ecosistemas en los que se distribuyen».
Del mismo modo, apunta que es importante identificar sus movimientos, puesto que, de ser «erráticos», es probable que pudiera estar «enfermo o en búsqueda», por lo que sería recomendable alejarse de la playa». No obstante, otras veces, podría pasar de largo, «lo que significa que está de crucero». Son tiburones que pueden encontrarse cerca de la costa, rompiendo la superficie del agua «con su característica aleta dorsal» hasta los 200 – 500 metros de profundidad».