Los bosques y árboles urbanos son una buena fuente de oxígeno y sombra para los ciudadanos. Lamentablemente, el cambio climático está ocasionando severos daños en estas zonas verdes
Más del 40% de los árboles urbanos de Santa Cruz de Tenerife están en riesgo debido al cambio climático. No obstante, este peligro puede subsanarse, según un grupo de investigadores de la Universidad de Sidney Occidental, que estudian los efectos del calentamiento global en los bosques urbanos.
Para llevar a cabo el proyecto, han analizado 164 ciudades del mundo, como Valencia, Barcelona y Santa Cruz de Tenerife. Asimismo, señalan que el estrés que sufren los árboles en las ciudades tienen como principal desencadenante el aumento de la temperatura y la disminución de precipitaciones, fruto del cambio climático.
Santa cruz de Tenerife ha participado en esa investigación, de las 257 especies analizadas, la conocida como Laurel de Indias es la que corre mayor riesgo. Los expertos advierte sobre la amenaza de múltiples especies, que obligará a que estas se adapten. «Los bosques termófilos, como los sabinares o los acebuchales, tienen muy difícil su continuidad en las islas», esto se debe a la «fragmentación. Apenas existen formaciones de este tipo», explica el catedrático de Botánica de la ULL, Marcelino del Arco.
Una de las opciones para salvaguardar los bosques y árboles que proponen los investigadores es el intercambio entre ciudades. «Especies que no están amenazadas en una ciudad» pueden trasladarse a otras y «ver si puede ser integrada», señala el profesor de Ecología de la Universidad de Sidney Occidental, Manuel Esperón-Rodríguez.