La apertura de las fronteras terrestres con ambos países permitirá la reanudación de viajes no esenciales como el turismo
Estados Unidos abrirá desde noviembre sus fronteras terrestres con México y Canadá para las personas que hayan recibido el esquema completo de vacunación, según altos funcionarios de la Administración.
Esta medida, que permitirá la reanudación de viajes no esenciales como el turismo, se anunciará de forma oficial en los próximos días y se alinea con la decisión anunciada por Washington en septiembre de que permitirá el acceso vía aérea de personas procedentes de la UE y otros países con un certificado de vacunación y un test negativo «a principios de noviembre».
Relajación de las prohibiciones
Esta nueva regla supone una relajación de las prohibiciones que han estado vigentes durante más de 18 meses y se implementará por etapas, con una primera fase a principios de noviembre en la que se permitirá a los viajeros vacunados acceder sin que se trate de casos esenciales, mientras en la segunda, a partir de enero de 2022, se pedirá la vacunación a todo los viajeros, esenciales y no esenciales.
Un alto funcionario de la Administración dijo que el enfoque por fases proporcionará «tiempo suficiente» para que los viajeros esenciales, como los camioneros, se vacunen.
De este modo, se espera que los cambios revitalicen los viajes internacionales antes de la temporada de vacaciones, así como se responde a las quejas de quienes viven en las comunidades fronterizas, que criticaron que Estados Unidos imponía normas diferentes respecto al acceso aéreo y terrestre.
La nueva política pondrá fin a las restricciones a los viajes no esenciales que se aplicaron por primera vez en marzo de 2020, aunque los estadounidenses no tenían restricciones para volver a casa. La nueva norma también se aplicará a los viajes transfronterizos en ferry.
Otros detalles de cómo funcionará la medida aún deben ser ultimados, según los altos funcionarios que han pedido el anonimato para adelantar los cambios en la política del Departamento de Seguridad Nacional, informa la agencia Bloomberg.
Los cambios son independientes de la política de la Administración utilizada para expulsar a los migrantes que cruzan la frontera ilegalmente, ya que se mantendrá en vigor la orden de salud pública del mandato del expresidente Donald Trump que permite la rápida expulsión de 958.000 migrantes.