Esta especie de tiburón es muy común en las aguas canarias aunque, sin embargo, se encuentra amenazada por la sobrepesca
Detectan un tiburón en las piscinas naturales de El Altillo, Moya

El ejemplar de cazón que quedó atrapado este jueves en una piscina natural de El Altillo, en Moya, ha podido salir a mar abierto por sus propios medios y tras muchos intentos durante la madrugada con la marea llena.
Al parecer, el tiburón había quedado atrapado la noche anterior cuando subió la marea y no pudo salir cuando bajó la misma. Se trata de una hembra adulta de cazón con más de un metro de longitud, una especie muy común en las aguas Canarias y que es totalmente inofensivo.
El animal sorprendió a los vecinos y vecinas de la zona que se habían acercado a las piscinas de la localidad grancanaria. Así, la Policía Local cerró el acceso por precaución a la espera de que siguiese su camino en las próximas horas con la marea alta.
El cazón, una especie amenazada
Antes de que volviera a mar abierto, Maite Asensio, licenciada en Ciencias del Mar y especializada en Oceanografía, además de integrante de la asociación ‘Latitud Azul’, pudo capturar con la ayuda de su cámara subacuática imágenes de la hembra de cazón.
Asensio señala que el organismo del que forma parte ejecuta un Proyecto de Conservación de Rayas y Tiburones en Canarias con el objetivo de elaborar una estrategia de conservación para estas especies tan comunes en el Archipiélago.
El cazón es una especie muy común en Canarias, aunque también se encuentra en aguas del Mediterráneo y del Atlántico oriental. Sin embargo, su población ha disminuido considerablemente en las Islas en las últimas décadas debido al uso de su carne en platos, como los tollos canarios. Es por esta razón que en muchas zonas se ha convertido en una especie vulnerable: en 2020, fue clasificada como «en peligro de extinción» por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).
