La selección española no pasó del empate a un tanto ante Grecia en el estadio Nuevo Los Cármenes, tras ver igualado el tanto marcado en el primer acto por Álvaro Morata en un extraño penalti señalado a Íñigo Martínez que materializó Bakasetas.
Se atascó España ante el planteamiento defensivo de Grecia y no encontró soluciones ofensivas Luis Enrique Martínez, que hizo debutar en la segunda parte a Pedri y Bryan Gil.
Un disparo al larguero de Dani Olmo avisó del tanto de Morata a los 33 minutos, tras un gran pase picado de Koke Resurrección.
A los 56 minutos firmó Grecia la sorpresa gracias a la decisión del colegiado de pitar penalti por una acción de despeje de Íñigo Martínez, que golpeó en un rival tras impactar primero con el balón.
Los intentos de España hasta el final de partido no acabaron en gol y comenzó el camino al Mundial con un resultado inesperado.