Putin ha dicho tras su reunión con Xi Jinping que el «plan chino» podría servir «como base para hallar una solución política» a la guerra en Ucrania
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, no ha descartado el «plan chino» para lograr la paz en Ucrania y ha señalado que «podría servir como base para hallar una solución política» a la guerra tras mantener un encuentro con su homólogo chino, Xi Jinping, este martes en Moscú.
Así, el mandatario ha calificado de «exitosas y constructivas» sus negociaciones con Xi, con el que ha mantenido una reunión que se ha alargado hasta las tres horas. «Estamos orgullosos de haber tenido nuevamente la oportunidad de recibir a nuestro querido a amigo, Xi Jinping, durante una visita estatal a Rusia», ha dicho antes de sostener que la solución al conflicto en Ucrania «requiere el respeto a las preocupaciones de todos los países en materia de seguridad».
«Nuestras conversaciones, ayer y hoy, han contado con la participación de nuestras delegaciones y han salido adelante con éxito, de forma cálida y en una atmósfera constructiva», ha puntualizado durante una rueda de prensa conjunta en la que ha anunciado la firma de dos declaraciones que «muestran la naturaleza especial de las relaciones» entre ambos países.
Las mejores relaciones de la historia
Para Putin, estas relaciones es encuentran, de hecho, «en el mejor momento de la historia y son un ejemplo de la interacción estratégica y exhaustiva» entre las partes, según informaciones de la agencia de noticias Interfax.
«Rusia y China están unidos por unas fuertes relaciones de buena vecindad, asistencia mutua, de amistad entre los pueblos y de diálogo activo a todos los niveles. Estamos en contacto continuamente con China», ha destacado Putin, que ha incidido en que esto permite a ambos países «hallar soluciones a todos los problemas (…) y mantener la agenda internacional bajo control».
Los dos líderes han procedido a firmar una declaración sobre el desarrollo de la cooperación económica y otra sobre el refuerzo de la asociación «integral y la cooperación estratégica» en la región, si bien está previsto que firmen una decena de documentos de cara al final de la cumbre. En este sentido, han reivindicado la importancia de las relaciones bilaterales, especialmente en materia económica y comercial, como principal prioridad.
Proyecto para un gran gasoducto
Putin, que ha manifestado que Rusia está lista para aumentar los suministros ininterrumpidos de petróleo a China, ha advertido de que el país podría verse obligado a «responder si Occidente decide utilizar armas con componentes nucleares» y no ha descartado viajar a China de aquí a finales de año y a pesar de la invasión de Ucrania, según informaciones de la agencia de noticias TASS.
Por otra parte, el presidente ruso ha anunciado que se ha logrado un acuerdo sobre la «práctica totalidad de los parámetros del gasoducto Power of Siberia 2». «Hemos abordado un buen proyecto. Se trata del nuevo Power of Siberia 2, que pasa por Mongolia. Casi todos los parámetros se han acordado», ha explicado respecto a un gran gasoducto con el que busca exportar gas natural desde Siberia al noroeste de China.
Xi ha destacado así que Rusia y China intensificarán el comercio de hidrocarburos y la cooperación en materia económica, al tiempo que ha alabado las conversaciones y las ha calificado como «fructíferas». «Acabamos de mantener unas negociaciones muy francas, amistosas y productivas», ha resaltado.
Paz en Ucrania
Además, ha hecho hincapié en la importancia de lograr la paz en Ucrania «mediante el diálogo», una postura que ya ha expresado en ocasiones anteriores. «Estamos firmemente comprometidos con los principios de la Carta de la ONU, mantenemos una postura objetiva e imparcial», ha expresado antes de que ambos líderes hayan mostrado su postura tajantemente contraria a «cualquier tipo de independencia en Taiwán».
Putin ha aprovechado la ocasión para confirmar que no tiene intención alguna de reunirse con su homólogo estadounidense, Joe Biden, en un futuro cercano. El asesor de la Presidencia rusa, Yuri Ushakov, ha indicado por su parte que «ese tipo de encuentro no está planeado».
Ataque con drones
Mientras tanto el conflicto continúa y este miércoles un ataque con drones ha dejado varios de muertos en la localidad ucraniana de Rzhishchiv, situada en la región de Kiev, según han denunciado las autoridades de Ucrania, que han afirmado que además hay varios desaparecidos.
El jefe de la Policía de la región de Kiev, Andriy Nebitov, ha indicado en su cuenta en Telegram que los equipos de rescate han recuperado el cadáver de una cuarta persona en el edificio alcanzado, horas después de cifrar en tres el número de fallecidos a causa del ataque.
«Ha sido sacado del quinto piso del edificio destruido por los drones el cuerpo de otra persona muerta en el ataque con drones de esta noche», ha especificado. «La cuarta víctima es un conductor de 40 años que no bajó al refugio durante el ataque aéreo», ha dicho.
Nebitov había señalado horas antes que los drones han alcanzado «un edificio residencial» y detalló que «las primeras explosiones tuvieron lugar en torno a las 3.00 horas (hora local), seguidas de varias más». «La Policía y los servicios de emergencia han evacuado a más de 200 personas», destacó.
Visita del primer ministro japonés
Por otra parte, el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, ha llegado este martes por sorpresa a Kiev, siendo hasta ahora el último de los líderes del G7 en visitar el país en el marco de la actual guerra con Rusia, de la que se cumple poco más de un año.
Kishida ha llevado a cabo el último tramo del viaje a la capital ucraniana por tren desde la vecina Polonia. A su llegada ha sido recibido por varios funcionarios del Gobierno de Zelenski, entre ellos la primera viceministra de Asuntos Exteriores, Emine Japarova, quien ha calificado la visita de «histórica».