El PP presenta en Arrecife una moción para pedir que se reconozcan las corridas de toros como Patrimonio Cultural Inmaterial, algo que para los animalistas es «surrealista» en el contexto canario
La Fundación Franz Weber ha calificado de «surrealista» que el PP presente en Lanzarote una moción para defender la tauromaquia, cuando hace medio siglo que no se celebran corridas en la isla y ese mismo partido apoyó en 1991 la ley de protección animal que veta su celebración en toda Canarias.
Propuesta «extemporánea e ideal»
En un comunicado, esta organización defensora de los animales considera «extemporánea e irreal en términos históricos, sociales y éticos«, la moción que el PP pretende que debata el Ayuntamiento de Arrecife para pedir que se reconozcan las corridas de toros como Patrimonio Cultural Inmaterial.
Los naturalistas recuerdan que la tauromaquia desapareció de Lanzarote hace medio siglo. La última corrida en la isla se celebró en los años setenta en Tías. La plaza del municipio se demolió años después.
Por ello, la Fundación entiende que la propuesta del PP «responde a un pensamiento centralista y a una realidad social completamente diferente a la conejera».
Realidad canaria diferenciada
Añade que, «a la falta de demanda, a una realidad diferente a la de la península y al marco normativo, se suma una advertencia del Comité de los Derechos del Niño”.
El PP plantea, a juicio de la Fundación, que el Ayuntamiento de Arrecife se manifieste contra la objeción de este organismo de Naciones Unidas en 2018. Ese año solicitó de forma específica al Gobierno español que «alejara» a los menores de edad de la violencia de la tauromaquia.
Esta petición se complementó con la Observación General 26 sobre el derecho de niñas, niños y adolescentes a un medio ambiente sano. Incluía una solicitud acerca de evitar que estos grupos vulnerables fueran expuestos a la violencia, incluida la ejercida sobre animales.


