La crisis hídrica comenzó a mediados de julio tras detectarse la presencia de la bacteria Clostridium perfringens en el depósito de Majuelo, el más alto del municipio
Después de un largo periodo de 21 días sin acceso a agua potable, los vecinos de Arafo, en Tenerife, pueden respirar aliviados. El Ayuntamiento ha confirmado este lunes que las últimas analíticas realizadas al agua han resultado favorables, lo que permite restablecer el suministro.
La crisis hídrica comenzó a mediados de julio tras detectarse la presencia de la bacteria Clostridium perfringens en el depósito de Majuelo, el más alto del municipio. Esta situación obligó a restringir el consumo de agua en buena parte del casco urbano, La Hidalga y El Carretón, generando grandes inconvenientes a los vecinos.
Durante estos días, el Ayuntamiento ha trabajado incansablemente junto a la empresa concesionaria, Aqualia, para solucionar el problema. Se han instalado nuevos filtros y se ha llevado a cabo una limpieza exhaustiva del depósito afectado. Además, se ha puesto a disposición de los vecinos camiones cisterna para garantizar el suministro de agua para consumo humano durante este periodo.
Aunque los niveles de la bacteria disminuyeron rápidamente, las autoridades sanitarias mantuvieron las restricciones hasta obtener la confirmación oficial de que el agua era completamente segura para el consumo. Finalmente, tras una nueva ronda de análisis, Sanidad ha dado el visto bueno para levantar las restricciones.
Con la recuperación del suministro de agua, Arafo vuelve a la normalidad y sus vecinos pueden retomar sus actividades cotidianas sin las limitaciones impuestas por esta situación excepcional.