Según la Aemet, las islas tuvieron un mes de julio cálido, con una temperatura media de 23ºC, y extremadamente húmedo, al contabilizar 3,3 mm
En lo que se refiere a la temperatura media en Canarias en el mes de julio fue de 23ºC, con una anomalía respecto a la referencia de +0,7ºC, y a la que corresponde un carácter cálido pero, también,y extremadamente húmedo.

Las temperaturas mínimas más bajas fueron, según las altitudes a las que están instaladas las estaciones, de 17ºC en Vallehermoso-Dama (La Gomera), a una altitud de 190 metros, el día 15; y de 7,2ºC, el día 14, en Ravelo, en el municipio tinerfeño de El Sauzal, a 922 metros, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Asimismo se registró 9,1ºC en San Andrés-Depósito Cabildo (El Hierro), a 1.070 metros de altitud, el día 15; y 7,8ºC en El Parador de las Cañadas (Tenerife) el día 8, a 2.150 metros.
De todos modos, indica que térmicamente el mes de julio se caracterizó por tres episodios cálidos, siendo el primero de ellos el que se produjo entre los días 1 y 5, llegando a una anomalía de +2,8ºC, el día 4, en la temperatura media sobre la media de referencia.
Un segundo episodio fue el que se produjo entre los días 15 y 18, considerado como el más intenso del mes y en el que se alcanzó una anomalía de +6ºC en la temperatura media sobre la de referencia durante el día 17; mientras que el tercer episodio, entre los días 27 y 29, se alcanzó una anomalía de +3ºC de la temperatura media sobre la de referencia, durante el día 28.
Masa de aire cálido y seco
En todos los casos, los episodios estuvieron determinados por la aproximación, a niveles medios y altos, de la zona oeste de la dorsal subtropical africana, con establecimiento de flujo de componente sur y la llegada al archipiélago de masas de aire continental, cálido y seco, así como calima en altura.
Simultáneamente el desplazamiento del centro del anticiclón atlántico a posiciones más próximas a la Península Ibérica (al oeste de la misma), hizo que el flujo en superficie tuviese mayor componente este, con menor contenido de humedad y mayor temperatura, contribuyendo a los ascensos.
Esta situación, explican, provocó descensos acusados en la altura de la inversión y, por tanto de la altitud a la que se mantiene el régimen de alisios, quedando reducida durante el episodio de los días del 15 al 18, en zonas costeras de las vertientes norte de las islas más montañosas.
Los episodios cálidos afectaron principalmente a zonas de medianías de sur y oeste de Gran Canaria, así como de Tenerife, además de a zonas de interior del sur de Fuerteventura.
Extremadamente húmedo
Respecto a las precipitaciones acumuladas, se contabilizó una media de 3,3 mm, lo que implicó el 367 por ciento del valor esperado, y situándolo como un mes pluviométricamente extremadamente húmedo. Las precipitaciones fueron, en general, débiles pero, de forma relativa, altas para un mes de julio en Canarias.
En este sentido, se distinguen dos episodios en los que se concentraron las precipitaciones, en los que la posición del anticiclón atlántico durante esos días, con centro aproximadamente sobre las Azores, indujo un flujo de norte, haciendo llegar a Canarias masas de aire con mayor contenido en humedad.
A ello contribuyó en el primer episodio, registrado entre los días 6 y 10, la presencia de un vórtice en altura entre Canarias y Azores, y en el segundo, durante los días 20 al 25, la aproximación de una vaguada, al norte de la Península Ibérica.
En estos casos, las precipitaciones afectaron a la zona norte de La Palma, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria, además de las zonas altas de El Hierro, así como a Lanzarote y Fuerteventura. Estas dos islas sólo recibieron precipitaciones durante los días del 6 al 10, mientras que el segundo episodio sólo dejó precipitaciones en una estación de Lanzarote.