Conocer más sobre nuestros aborígenes y cómo eran sus sociedades es el reto al que se enfrentan quienes se dedican a la Arqueología, una profesión a veces mitificada por el cine y en la que han tenido protagonismo, casi siempre, las figuras masculinas. Sin embargo, son cada vez más las mujeres que se han incorporado a esta disciplina y, por tanto, han ido añadiendo nuevos enfoques con perspectiva de género a las investigaciones. De todo ello, se ha hablado en las recientes jornadas organizadas en Casa África y coordinadas por la Doctora en Arqueología y profesora de Ciencias Sociales de la Universidad Europea de Canarias, Elena Pérez. Esta semana ha sido la invitada a la sección de igualdad de todos los martes en Buenos Días Canarias.
Hallazgos que cambian la historia
Esta experta ha afirmado que «el papel que desarrollaban las mujeres aborígenes ha sido más relevante de lo que se creía» y eso ha sido posible, según ha explicado esta experta, tras el análisis e investigación arqueológica realizada en los últimos años. Según ha explicado, esta disciplina está aportando cuestiones que permiten completar la mirada al pasado. Sabemos, por ejemplo, que «había roles diferentes en las actividades diarias, solo que hasta ahora se pensaba que eran estereotipadas». Ahora se ha descubierto que las mujeres también participaban en actividades como la pesca o la caza.
En ese sentido, uno de los detalles que se ha encontrado en restos óseos tiene un vínculo directo con una actividad acuática como el marisqueo o la pesca. Según ha explicado Elena Pérez, hay restos óseos que muestran signos de una patología conocida como «oído del surfista», la exóstosis auditiva. La novedad es que se han encontrado indistintamente en restos de mujeres y de hombres «lo que indicaría que ellas también realizaban esta actividad».