Las diferentes rutas de las pateras hacia Canarias se han cobrado 785 vidas en lo que va de año, el doble que en 2020 a la misma fecha, con 379 muertes solo en agosto, según datos de Naciones Unidas
El programa Missing Migrants (Inmigrantes Desaparecidos) de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) recopila a diario los casos en los que se ha podido verificar la muerte o desaparición de un emigrante en cualquier lugar del mundo.
En la llamada Ruta Canaria, la cuenta a fecha de 14 de septiembre está en 785 vidas perdidas, frente a las 343 del año pasado en el mismo período, lo que supone un aumento del 128 %.
La OIM precisa siempre que sus datos deben tomarse como «cifras mínimas», ya que reconoce que existen varios «naufragios invisibles» en los que no tiene forma de documentar qué les ocurrió a los ocupantes de esas pateras, porque no se ha recuperado ningún cuerpo ni hay ningún superviviente que pueda aportar su testimonio.
No obstante, las 785 muertes o desapariciones en el mar que sí ha verificado ofrecen un balance a esta fecha de tres víctimas diarias, lo que confirma a la Ruta Canaria como una de las vías migratorias más peligrosas del mundo, según ha remarcado en varias ocasiones el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR.
En agosto perdieron la vida 379 personas
El mes pasado resultó especialmente dramático: volcó una neumática con 52 ocupantes a 250 kilómetros de Canarias y solo sobrevivió una mujer, una patera se perdió a 500 kilómetros de El Hierro y murieron 29 personas, entre ellas siete niñas; otra neumática quedó a la deriva en El Aaiún y fue encontrada dos semanas después en Mauritania con solo siete personas a bordo (de 54 que partieron); hubo otro naufragio con una decena de muertos en Lanzarote…
Según la OIM, solo en agosto 379 personas perecieron intentando llegar a Canarias en pateras o cayucos, doce cada día.
La secuencia de víctimas en la Ruta Canaria en lo que va de año, por meses, es la siguiente: 22 muertos en enero, ninguno en febrero, 23 en marzo, 84 en abril, dos en mayo, 258 en junio, 17 en julio, 379 en agosto y ninguno en septiembre (hasta hoy, día 14).
Hasta el 31 de agosto, habían llegado a Canarias 9.255 inmigrantes en 243 pateras o cayucos, un 135 % más que el año pasado, de acuerdo con el último informe quincenal del Ministerio del Interior.
Si esa cifra se cruza con el balance de muertes que reporta la OIM, se observa que, como promedio, fallece un inmigrante por cada once que consiguen llegar a las islas desde las costas de África.
Caminando Fronteras, colectivo que sigue también de forma intensa lo que ocurre en la Ruta Canaria, eleva el balance de víctimas por encima de los 2.000 (1.922 en el primer semestre), porque, en su caso, incluye los ocupantes de una treintena de pateras que desaparecieron sin dejar rastro