La economía familiar impidió a la madre comprar dos pasajes para una patera y, en busca de un futuro mejor para su hija, tuvo que dejarla en Marruecos y embarcarse hacia Canarias
Tras un año sin verse, Yaya y su madre se han reencontrado en Gran Canaria. Debido a la escasez de medios para pagar dos pasajes en una patera desde Marruecos, madre e hija se separaron.
La niña quedó al cuidado de una conocida en Marruecos y, gracias a Begoña, una voluntaria que se volcó con el caso, este año consiguió llegar a Gran Canaria. Tras el reencuentro viajaron a París, donde residen con su padre y hermano.
La reagrupación familiar es complicada, pues el protocolo varía según la isla y en Gran Canaria, aseguran, es especialmente lento. El Gobierno de Canarias tiene bajo su tutela a 2.431 menores no acompañados, de los cuales 927 están pendientes de confirmar su edad.