El último informe de Cáritas refleja un aumento del 23% de las personas sin hogar en Tenerife con respecto a 2023
El estar sin trabajo no es la causa principal para que más de 2.800 personas estén sin vivienda en Tenerife. Según el último informe de la ong Cáritas, muchas de las personas que duermen en la calle tienen trabajo pero su salario no les permite acceder a un alquiler.
Los altos precios de los alquileres y el encarecimiento del coste de la vida han aumentado el número de personas sin hogar. En 2024 ha subido en un 23%, con respecto al año anterior.
En el estudio ha colaborado también el Cabildo de Tenerife, y consta que el aumento de las viviendas vacacionales ha influido también para que se disparen los precios de los alquileres. Se trata de un problema estructural, añaden, en el quinto Informe sobre Exclusión Residencial Extrema en Tenerife.
Deficiencias en el sistema de protección
Este estudio, destacan, pone de manifiesto una crisis social estructural en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. En su presentación oficial alertan de que es uno de los peores datos de los últimos cinco años.
Además, pone de manifiesto las deficiencias en el sistema de protección, y no es una consecuencia directa del elevado precio de la vivienda.
Esta emergencia habitacional se extiende a los 31 municipios de la isla. Un estudio que aborda a todas las personas que carecen de una vivienda digna y no solo a los que duermen en la calle. Situaciones de vulnerabilidad que conoce Cáritas Diocesana de Tenerife a través del personal que trabaja en los diferentes puntos del territorio insular.
Sinhogarismo por municipios
En el informe destaca la capital por concentrar el mayor número de personas sin hogar, el 37%. Después, están los municipios turísticos de Arona, Adeje y Puerto de la Cruz. En quinto lugar se coloca San Cristóbal de La Laguna, y posteriormente, Granadilla de Abona.
Las causas que señalan están relacionadas con el aumento de viviendas vacacionales, el desorbitado aumento de precios de la vivienda libre y el déficit de vivienda social generalizado y sostenido durante décadas a nivel nacional.
La mayoría de los afectados son hombres, con un 76,5%, y las mujeres serían el 23,5%.
Los problemas de salud tienen especial incidencia en este colectivo. El 44,5% de las personas sin hogar padecen enfermedades crónicas relacionadas con los trastornos mentales. Otra consideración es el estado anímico, más del 80% declara estar desesperanzado respecto al futuro.
Las conclusiones van encaminadas a que las diferentes administraciones tomen medidas urgentes. La creación de un parque de vivienda social y la creación de equipos que medien entre ellos y los servicios sociales y sanidad.


