CULTIVO DE LECHUGAS
Tibisay Morales es Graduada en Dirección Internacional de Empresas de Turismo y Ocio. En la actualidad se dedica a la gestión de la empresa familiar, dedicada al sector de la hostelería y de la agricultura.
La agricultura siempre ha formado parte de su vida, sus abuelos han sido agricultores y su padre es un gran defensor de esta parte de la ‘cultura de la isla’.
Este proyecto familiar comenzó hace 20 años y ha ido creciendo poco a poco en torno a la finca. Todos los arenados son de nueva creación, y cultivados de forma manual y tradicional.
Aunque en sus inicios eran de agricultura “común”, hace unos años empezaron la transformación a agricultura ecológica. En la actualidad todos los productos son 100% ecológicos.
Al vivir en una isla tan seca, te das cuenta de lo sacrificado que resulta la agricultura, pero al tener el ejemplo familiar muy presente, es consciente que por mucho que cueste, si lo llevas dentro, lo vives, lo disfrutas y lucharas para que el campo sea un sector más justo y para que se le dé la importancia que el agricultor y la naturaleza se merecen.
Considera que la agricultura ecológica, tradicional y de cercanía es una base fundamental en nuestra alimentación, forma de vivir, economía y sociedad.
Debemos ser más conscientes de lo que comemos. Ignoramos la cantidad de productos químicos que puede contener una pieza de verdura y el daño que eso hace al suelo.
Además de lo que sufren los agricultores locales y pequeños por no poder vender, o al menos tener un precio justo por su producto (que les ha costado un esfuerzo incalculable) porque económicamente es mejor comprar en grandes cantidades a enormes productores de otros países o mercados.
Algo que ella siempre defiende es que, en su caso, en la isla de Lanzarote, los agricultores son muy cuidadosos con el entorno. El paisaje de esta isla en gran parte es el campo, las viñas, las tierras plantadas.
Es increíble ver como de entre toda la ceniza volcánica se crearon campos tan bonitos, aprovecharon ese volcán, lo llenaron de líneas perfectamente rectas para plantar cebollino, tomates o viña, muros de piedra, barrancos respetados, cada detalle que ellos crearon lo deberíamos proteger las nuevas generaciones, defenderlo, porque la agricultura es mucho más.
La agricultura ecológica es un aprendizaje constante porque se está innovando mucho y deben estar atentos a todas las novedades, así como probar e investigar lo que funciona en este tipo de suelo.
Su filosofía es intentar, en la medida de lo posible, mejorar cada cosecha.