La Audiencia Nacional inicia este miércoles a juzgar a José Manuel Villarejo por el denominado caso Tándem, por presuntos trabajos de espionaje
El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha confiado en que tendrá «un juicio justo» en la Audiencia Nacional, que comienza este miércoles a juzgarle por tres presuntos encargos de espionaje: «Espero que no sea una justicia folclórica. Sería como un linchamiento, como en el oeste».
La sección cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia ha dado inicio con más de 45 minutos de retraso a la primera vista oral por el denominado caso Tándem, donde se enjuiciarán tres piezas –Iron, Land y Pintor– sobre tres presuntos trabajos de espionaje encargados al excomisario y a sus colaboradores, algunos de ellos también policías.
A su entrada en la sede que el tribunal tiene en la localidad madrileña de San Fernando de Henares, Villarejo ha hecho unas breves declaraciones a los medios, ante los que se ha mostrado «tranquilo» y confiado en que tendrá un procedimiento justo.
El excomisario, en primera fila y vestido con la toga de abogado al ejercer como codefensor en esta causa, ha asegurado que «en absoluto» ha usado medios de la Policía Nacional para sus negocios privados y ha indicado que «jamás» llegará a un acuerdo con la Fiscalía, como sí han hecho otros acusados.
«A mí no se me ha tratado como un presunto delincuente; a mí se me ha tratado como un enemigo al que hay que aniquilar», ha aseverado para añadir más tarde que «el miedo pudre por dentro y emponzoña los corazones».
Villarejo se enfrenta a una petición total de casi 110 años de cárcel por diversos delitos.