Durante el siglo XX se han puesto en marcha diversas técnicas para intentar detener el avance del volcán y sus ríos de lava. Desde cavar zanjas, proyectar agua helada o explosiones con dinamita
Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria desplazados en La Palma para ayudar frente a la erupción intentaron la pasada noche canalizar una colada de lava hacia un barranco para salvar el pueblo de Todoque.
«Por intentarlo que no sea», relataba anoche uno de los bomberos que participaba en la operación, en vídeo que muestra a sus compañeros abrir con excavadoras una zona libre de obstáculos y una zanja amplia con la esperanza de que el río de lava que está a las puertas del pueblo elija el camino fácil y siga barranco abajo.
Zanjas, agua helada, explosiones…
A lo largo de la historia se han puesto en marcha diversas técnicas para intentar detener el avance del volcán y sus ríos de lava. El objetivo es crear una barrera, intentar dirigir una fuerza que se asume supera casi todos los esfuerzos
En 1936 se puso en marcha una de estas iniciativas sobre un cráter de Hawai mediante bombas lanzadas desde aviones.
Si tuvo más éxito el bombardeo de agua sobre el volcán Eldfel en Islandia, en 1973. Durante casi cinco meses se lanzaron litros de agua marina helada con cañones a la colada volcánica que se enfriaba al contacto con esta
En el Etna han intentado tapar las bocas con la propia lava e, incluso, lanzando bloques de hormigón desde el aire.
Todo ello con poco éxito para detener el lento pero implacable paso de la fuerza da la naturaleza.