La Declaración de Zona Afectada por la Emergencia (‘zona catastrófica’) aprobada por el Gobierno permitirá la solicitud de ayudas económicas para los afectados por los incendios en Tenerife, La Palma y Gran Canaria
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes declarar zona afectada gravemente por emergencia de protección civil (‘zona catastrófica’) a consecuencia de los incendios forestales a la isla de Tenerife junto a varias áreas en las comunidades autónomas de Andalucía, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad Foral de Navarra, la Comunidad Valenciana y Extremadura.
Así lo ha anunciado la ministra portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, donde se ha referido asimismo en la necesidad de avanzar en la solución de estos problemas, igual que el de los últimos días por la DANA.
Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, ha presentado un avance del balance de incendios forestales de 2023, cuando se han producido 37 fuegos desde el pasado 17 de mayo que obligaron a declarar el nivel 1 o nivel 2 dado el nivel de la emergencia.
Entre estos 37 ha destacado el fuego de Araya (Tenerife), que se inició el 15 de agosto y que ya está controlado pero sigue activo y que ha quemado ya más de 14.000 hectáreas en doce localidades distintas y obligó a evacuar de forma preventiva a unas 13.000 personas.
Además, ha indicado que tanto en este caso como en los otros 36 incendios incluidos en el acuerdo adoptado hoy por el Consejo de Ministros, la declaración de ‘zona catastrófica’ permite a todos los afectados de Tenerife poner en marcha la solicitud de ayudas económicas necesarias para recuperar la normalidad de su vida cotidiana.
Tenerife, La Palma y Gran Canaria, entre las zonas afectadas por incendios este verano
Entre las zonas dañadas por los fuegos este verano, están Tenerife, La Palma y Gran Canaria.
Esta declaración aprobada por el Gobierno será recibida, en concreto, por las áreas afectadas por el incendio de Tijarafe y Puntallana en La Palma, el de Tejeda y San Mateo en Gran Canaria, y el que comenzó en Arafo y se extendió por buena parte del norte de Tenerife.
Según los datos del informe de evolución de incendios de la Dirección de Protección Civil y Emergencias, ha dicho Marlaska, tiene especial relevancia el de Arafo (Tenerife) que «sigue activo» desde el pasado 15 de agosto y ha devastado ya una superficie que «supera las 14.755 hectáreas pertenecientes a 13 localidades distintas».
El incendio de Arafo obligó a evacuar más de 22.300 personas, según ha recordado el ministro.
Este año se han registrado 87 incendios con consecuencias para la Protección Civil
Marlaska ha defendido que el Gobierno ha tenido siempre claro su voluntad de no dejar a nadie atrás hasta que el último de los afectados haya podido recuperar su normalidad.
Asimismo, ha expuesto que en el Consejo de Ministros, al hilo de la declaración de zonas catastróficas, los Ministerios para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, de Defensa y Protección Civil, y el Departamento de Seguridad y Seguridad y de Ciencia e Innovación, así como el de Interior, han elevado un informe sobre la evolución de los incendios forestales durante este año 2023 hasta finales del mes de agosto.
En lo que va de año, según ha detallado, son ya 87 los incendios registrados con consecuencias para la Protección Civil y 18 de ellos han superado las 500 hectáreas afectadas, es decir grandes incendios forestales (GIF). En total, la superficie quemada en esos fuegos supera las 66.000 hectáreas, dos puntos por debajo de la media de la última década, de las cuales unas 47.000 han sido calcinadas en los 18 GIF.
El ministro ha afirmado que en este momento el Estado mantiene activados todos sus medios en apoyo a las comunidades autónomas y participa con más de 600 efectivos de las BRIF, 26 aviones, 24 helicópteros, 4 aeronaves de observación; cinco bases aéreas del Ministerio de Defensa para acometer un ataque directo al fuego en todo el territorio nacional.
Los equipos de extinción de España han colaborado en Chile, Canadá, Grecia y Portugal
En cuanto a la participación del Ministerio de Ciencia, ha dicho que desarrolla investigaciones científicas contra el fuego a través de la Agencia Estatal de Investigación mientras que el de Interior, mediante la Dirección General de Protección Civil y Emergencias mantiene el dispositivo de observación y coordinación del fuego 24 horas 7 días a la semana con 2.000 efectivos de la UME, los miembros de la Policía Nacional y los agentes de la Dirección General de Tráfico.
«El dispositivo del estado español integra a miles de profesionales experimentados. Somos una potencia reconocida en todo el mundo y recibimos numerosas peticiones de otros países para apoyar sus esfuerzos en otros países», ha subrayado Marlaska, que ha apuntado que España ha colaborado este año con sus equipos de extinción en Chile, Canadá, Grecia y mantiene una relación satisfactoria recíproca de respuesta con Portugal en esta materia.
Un total de 22.300 personas han sido evacuadas por incendios forestales
Marlaska ha celebrado que este año no hay que lamentar fallecidos, pero se han tenido que evacuar de forma preventiva a 22.300 personas. Tampoco han afectado las emergencias forestales a las grandes infraestructuras pero ha precisado que nueve de los han provocado cortes de carreteras; seis cortes de suministro eléctrico; en otros seis hubo que cortar el tráfico ferroviario y en el de Tenerife en algunos momentos quedó suspendido el servicio de agua potable.
Igualmente, ha indicado que la Unidad Militar de Emergencias (UME) ha sido activada en lo que va de 2023 en ocho incendios frente a las 55 intervenciones de 2022.
«No pretendo transmitir optimismo. Todos los años sufrimos grandes incendios forestales. Estamos ante un nuevo escenario ligado al cambio climático con importantes implicaciones en la seguridad ciudadana
aumentan sus índices de intensidad y riesgo. El Gobierno va a seguir trabajando para reducir los riesgos, y daños para sus ciudadanos y su patrimonio natural», ha manifestado el ministro del Interior que ha apostado por la anticipación como «mejor herramienta para afrontar» los escenarios que tanto el clima como la acción humana están transformando el bosque».