Se han administrado 41.963 dosis de vacunas a los niños de entre 5 y 11 años. En total se han administrado cerca de 3,8 millones de dosis
El 30,65 por ciento de la población pediátrica de entre 5 y 11 años cuenta con la primera dosis de la vacuna contra la covid-19, según Sanidad.
En total se han administrado 41.963 dosis de vacunas a los menores.
Además, continúa la vacunación de toda la población que requiere una dosis, dos o la de refuerzo.
Se han administrado cerca de 3,8 millones de dosis
En total, hasta este domingo se habían administrado 3.795.416 de dosis de vacunas contra la covid-19.
En el archipiélago hay 1.774.796 personas que han recibido al menos una dosis. Esto representa el 84,61 por ciento de la población diana en la que se ha incluido a los niños y niñas de entre 5 y 11 años.
Además, hasta ayer se había logrado inmunizar a 1.689.754 personas que ya han recibido la pauta completa de vacunación. Esto es, el 80,55 por ciento de la población diana del archipiélago.
En la actualidad los grupos del 1 al 7 (residentes y personal sanitario y sociosanitario de residencias; personal sanitario; grandes dependientes y cuidadores principales; personas vulnerables; colectivos con función esencial como docentes y policías y personas con condiciones de muy alto riesgo) y el 9 (población con edades comprendidas entre 50 y 59 años que ya alcanzó ese porcentaje) se encuentran vacunados con dos dosis entre el 99,5 y el 100%.
El 69,70 por ciento de las personas de entre 60 y 65 años tienen la pauta completa, lo que preocupa «especialmente» a Sanidad. Asegura que en este grupo hay una alta incidencia por haber cerca de un 16 por ciento de personas que aún no han recibido la primera dosis.
Se trata de un colectivo vulnerable por presentar, en su mayoría, patologías previas asociadas a la edad.
Del total de dosis administradas, 471.738 se corresponden a refuerzo contra el coronavirus.
Las dosis de refuerzo están indicadas para personas de más de 40 años. También para quienes se vacunaron con AstraZéneca y con Janssen (independientemente de su edad). Asimismo, el personal sanitario de Atención Primaria y Hospitalaria, trabajadores sociosanitarios en centros públicos y privados de los centros de mayores y de discapacidad.
También para personas internas en centros de atención a la discapacidad, pacientes con condiciones de alto riesgo y quienes reciban tratamiento con fármacos inmunosupresores.