Todavía no se ha podido cerrar esta residencia de ancianos de Santa Brígida porque aún quedan cinco personas en el interior del edificio
El Gobierno de Canarias tenía previsto este jueves cerrar y desalojar una residencia de ancianos privada de Santa Brígida, en la isla de Gran Canaria. Todo ello tras haber advertido al centro reiteradamente de que este incumplía la normativa.
Sin embargo, según ha podido confirmar Televisión Canaria, la clausura del centro aún no se ha producido debido a que aún quedan cinco residentes en el interior del edificio.
Según ha adelantado la Radio Canaria, se trata de la residencia Dulce Hogar, donde estaban hospedadas 38 personas. El Gobierno canario está facilitando a las familias afectadas información sobre las plazas disponibles en otros centros.
Esta es la segunda residencia de mayores que el Gobierno de Canarias clausura este año en esa misma zona por no reunir las condiciones mínimas que exige la legislación.
En mayo, ejecutó el cierre de la residencia de Monte Blanco, ubicada en Tafira Alta, también en la isla de Gran Canaria. En este caso, el centro no contaba con suficiente personal y no cumplía la normativa de seguridad y salubridad.