Un estudio identifica cinco microARN en sangre que abren nuevas vías para tratamientos que podrían mejorar la recuperación de pacientes con ictus isquémico
Científicos del Instituto de Investigación del Hospital del Mar han hallado cinco moléculas de microARN que predicen la recuperación tras un ictus isquémico. Estas moléculas, presentes en la sangre, están relacionadas con un peor pronóstico cuando sus niveles son elevados.
El ictus isquémico ocurre por un coágulo que bloquea un vaso sanguíneo en el cerebro. Es la principal causa de discapacidad en adultos y la segunda de muerte a nivel mundial, según la Organización Mundial de la Salud.
Nuevos tratamientos
El estudio, publicado en la revista Neurology, apunta a tratamientos que regulen estos microARN para mejorar la neurogénesis y la angiogénesis. Estas funciones son clave en la recuperación cerebral. «Podemos abrir nuevas vías para terapias eficaces», señaló el doctor Jordi Jiménez Conde, coordinador del estudio.
Validación con más de 400 pacientes
La investigación analizó datos de 215 pacientes en una primera fase. Posteriormente, los hallazgos fueron confirmados en una segunda cohorte de 191 personas. Esto refuerza la conexión entre los niveles de microARN y la evolución clínica.
La doctora Isabel Fernández Pérez destacó la necesidad de estudiar cómo estos microARN afectan directamente a las neuronas y los vasos sanguíneos. «Debemos confirmar si pueden usarse como tratamiento», afirmó. Algunos de estos microARN ya tienen inhibidores disponibles que podrían regular su actividad sobre los genes afectados.