El entrenador de la UD Las Palmas, Diego Martínez, analiza el próximo encuentro del equipo amarillo ante el Valencia CF en el Gran Canaria

El entrenador de la UD Las Palmas, Diego Martínez, considera un éxito llegar «vivos» a las últimas cinco jornadas de LaLiga EA Sports, antes de afrontar este sábado, ante el Valencia, el primero de los tres partidos que jugará el equipo amarillo como local en busca de la permanencia.
El técnico reconoce que sabe «dónde están los puntos» que necesitarán para lograr la salvación. Aunque, admite que con el apoyo de su público son «más fuertes».
Martínez ha resaltado en rueda de prensa que afrontaran un partido «complejo» ante un «histórico» como es el Valencia. El equipo ché llega al choque con «mucha confianza» por su trayectoria en los últimos meses.
Además, el entrenador amarillo ha elogiado el buen trabajo de Carlos Corberán, el técnico del Valencia, y a la inversión económica en fichajes realizada en el pasado mercado de invierno.
Por su parte, Martínez deja en el aire la reaparición del goleador portugués Fábio Silva porque dependerá «de sus sensaciones y de los servicios médicos».
El equipo
Preguntado por la posibilidad de que el centrocampista amarillo Javi Muñoz juegue la próxima temporada en el Valencia, ha dicho que en estas jornadas finales, con tanto en juego, «comienza el show». Considera que es el momento de las «fake news», o noticias falsas, aunque no sabe «si es verdad o no».
Por otro lado, el técnico gallego ve positivo que el equipo sea recibido por los aficionados en el trayecto hacia el estadio de Gran Canaria. Una iniciativa «natural» y que puede dar «energía» al equipo amarillo en un partido tan importante para su futuro.
El árbitro
Asimismo, ha restado importancia al hecho de que el encuentro sea arbitrado por Ricardo de Burgos Bengoetxea, colegiado del País Vasco, cuando el Deportivo Alavés es uno de los rivales en la lucha por la permanencia.
Martínez cree en la «honestidad» de los árbitros. También, recuerda que De Burgos Bengoetxea fue sometido a mucha «presión» antes de la final de la Copa del Rey entre FC Barcelona y Real Madrid.
