Una de cada tres personas ha estado de baja por estrés. España es el segundo país europeo donde más preocupa la salud mental
El estrés es la enfermedad mental que más preocupa a la sociedad mundial. En España afecta al 60% de la población. A nivel global la cifra es del 45%. Provoca bajas laborales, 1 de cada 3 personas ha faltado a su puesto de trabajo por estrés.
En Europa, España ocupa el segundo puesto, por detrás de Suecia, como uno de los países donde más preocupa. El último estudio de Ipsos por el Día Mundial de la Salud Mental, refleja que afecta más a las mujeres que a los hombres.
El 62% de las mujeres asegura haber pasado por un episodio de estrés en el último año. Un dato más alto en las generaciones jóvenes, los Millenials (25-40 años), declaran haberlo sufrido el 72% en el último año. Mientras, el 62%, entre los Z (18-24 años). Los considerados Baby Boomers (56-74 años), afirman haber estado estresados en un 39%.
Epidemia del siglo XXI
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) es la «epidemia de salud del siglo XXI». La competitividad en el campo laboral, la búsqueda constante de trabajo, la vida personal y la tecnología son las causantes del estrés. Este análisis de la sociedad también puntualiza en su mayor incidencia en las ciudades desarrolladas.
El próximo 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental, una ocasión para destacar la influencia del estrés en la aparición de diferentes patologías.
Ipsos es una de las mayores empresas de investigación de mercado. En este análisis entrevistó a más de 20.000 personas de 312 países.
La salud mental en los jóvenes
El suicidio es la segunda causa de muerte en entre los jóvenes de entre 15 y 19 años, por detrás del cáncer. Aldeas Infantiles SOS alerta sobre este problema en su informe “Detrás de la tristeza. Claves para visibilizar, entender y prevenir el suicidio adolescente y juvenil”.
La desconexión emocional, el aislamiento social, o la presión ejercida por las redes sociales, son, entre otros, los motivos que llevan un “vacío existencial”. También, resalta, el acoso escolar y el ciberacoso.
Las soluciones pasan por detectarlo a tiempo en el entorno familiar, incorporar la educación emocional en los centros escolares de infantil y secundaria. Por último destaca la labor de los medios de comunicación, “tienen el poder de derribar estigmas y mitos asociados al suicidio, ofreciendo una narrativa centrada en la prevención y en soluciones disponibles”.
En el ámbito gubernamental, hacen un llamamiento a las administraciones, por “carencias en el sistema sanitario en la atención a la salud mental en España”. La falta de recursos y personal dificulta la detección a tiempo de los casos más graves.