El Molina Sport venció en la gran final (2-1) al CPLV Caja Rural Valladolid disputada en el pabellón García San Román de Las Palmas de Gran Canaria
![El Molina Sport revalida el título copero. Imagen RFEP](https://rtvc.es/archivos/2025/02/Molina_Sport-1024x630.jpg)
El Club Molina Sport ha vencido este domingo al CPLV Caja Rural Valladolid por 2-1 en la gran final de la Copa del Rey de hockey línea y ha revalidado la corona de campeón para continuar la racha triunfal de esta temporada, en la que ya se ha hecho con la Supercopa de España.
Los grancanarios, que comenzaron el partido con 0-1 en contra, tiraron de casta y levantaron un resultado que tuvieron que defender con uñas y dientes hasta el final, incluso en acciones de inferioridad de cinco contra tres, pero con el aliento de un García San Román pintado de amarillo en las gradas.
Dani Díez adelantó a CPLV Caja Rural (0-1) tras aprovechar una superioridad por expulsión en el Molina en un gol de carambola tras rebotar el disco en el palo y en el patín de Javi Tordera, portero del Molina Sport.
Remontada
El equipo amarillo trataba de recortar diferencias tras verse sorprendido por una muy buena defensa de Caja Rural que estaba cortocircuitando al ataque más prolífico de la Liga Élite Masculina, hasta que, a falta de un minuto del descanso, Kevin Mooney encontró el resquicio para martillar la portería vallisoletana desde larga distancia (1-1).
Sería también Kevin Mooney, figura de la final, quien pusiera por delante al Molina Sport tras un robo de Gonzalo Jiménez que, con un pase tras su espalda, encontró a Mooney al espacio, quien no perdonó en el contraataque (2-1).
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El partido entró en unos minutos de locura, con los árbitros sumando expulsiones en uno y otro equipo, y Caja Rural buscaba a la desesperada el empate para no despedirse de sus opciones de título, pero ahí volvió a emerger la figura de un Javi Tordera que ha hecho de su portería un fortín en esta Copa del Rey.
El Molina Sport, que concluyó el partido en inferioridad numérica y defendiendo como gato panza arriba, consiguió aguantar el arreón final de los vallisoletanos y, espoleados por la afición local, certificó un nuevo título de Copa del Rey para sus vitrinas.