El arqueobotánico Jacob Morales, comparte sus investigaciones en el programa de La Radio Canaria
La variedad de cebada que hoy se cultiva en Gran Canaria es la misma que sembraban los aborígenes
La Radio Canaria emite este miércoles 27 de noviembre a partir de las 18:30 horas una nueva entrega de ‘Episodios Insulares‘ que se centra en la alimentación de la población aborigen en el Archipiélago.
Los primeros habitantes que llegaron a Canarias tuvieron que adaptarse al terreno y buscar fórmulas de alimentación para garantizar su subsistencia. No tuvo que ser una adaptación fácil aunque sabemos que trajeron consigo semillas y animales que les ayudaron en este proceso.
Paola Llinares, conductora del espacio radiofónico, hablará sobre la alimentación y agricultura de los indígenas canarios con Jacob Morales, doctor en Historia y profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, quien ha realizado investigaciones en yacimientos arqueológicos, principalmente, en el campo de la arqueobotánica y la carpología.
El arqueobotánico compartirá sus conclusiones e hipótesis sobre los alimentos que cultivaban y que trajeron del norte de África como cereales (cebada y trigo) y legumbres (habas, lentejas, guisantes…). También trajeron animales domesticados para alimentarse como cabras, ovejas y cerdos. Además, se nutrían de especies existentes en el Archipiélago como lagartos, semillas de pino, dátiles de palmera canaria, y en sus mares como viejas o mariscos.
Como datos a destacar, la variedad de cebada que hoy se cultiva en Gran Canaria es la misma que sembraban los aborígenes. Esto quiere decir, que hace unos 1400 años que se siembra la misma cebada en la isla.
Por otro lado, de la época prehispánica, solo se ha documentado la presencia de higueras en Gran Canaria. El experto deduce que al no ser un árbol endémico del Archipiélago, fue traído por los aborígenes desde el norte de África.
La caña de azúcar y otros nuevos alimentos tras la Conquista
Con la Conquista de las Islas, se implantó un modelo capitalista de producción y se sembraron cultivos “que dieran mucho dinero”, como la caña de azúcar, según Morales. Hubo que importar trigo y cebada en Gran Canaria, por lo que ya desde entonces se descuidó la soberanía alimentaria.
Aunque la conquista supuso lo que algunos expertos consideran un “genocidio”, también tuvo como efecto “la apertura de Canarias al mundo”, lo cual se notó también en la llegada de nuevos alimentos.