Las centrales nucleares españolas comienzan a preparar el plan preliminar de desmantelamiento. Lo deberá aprobar el Consejo de Seguridad Nacional en un plazo de 18 meses
Las centrales nucleares deberán preparar un plan preliminar de desmantelamiento y someterlo a la aprobación del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) en el plazo de 18 meses. Así lo establece la instrucción de seguridad publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) que entra en vigor este jueves 20 de enero de 2022.
Desmantelamiento de la energía nuclear
Este plan permitirá a las empresas analizar las mejoras tecnológicas a implementar en sus centrales para facilitar el proceso de desmantelamiento futuro.
La instrucción IS-45 sobre requisitos de seguridad, establece las directrices para prever el desmantelamiento de las instalaciones en fases tempranas de su explotación. Algo que no supone una carga económica adicional para las empresas, que llevan tiempo trabajando en este tipo de planes en colaboración con la Empresa Nacional de Residuos (ENRESA).
Esto asegura que la estrategia es coherente con los planes definitivos que diseñará la propia ENRESA para el desmantelamiento nuclear. Además de ser compatible con el Plan General de Residuos Radiactivos aprobado por el Parlamento.
Viabilidad económica del proyecto
En cuanto a la viabilidad económica, ENRESA dispone de un fondo dotado con aportaciones de las centrales durante su funcionamiento para garantizar el desmantelamiento.