Arsenio Iglesias entrenó al Deportivo de La Coruña en una de las etapas más gloriosas del conjunto gallego en el fútbol español
Arsenio Iglesias, el técnico del Superdépor, que también pasó por el banquillo del Real Madrid, ha fallecido este viernes a los 92 años. El ‘zorro’ de Arteixo, apodo por su astucia y su localidad natal en A Coruña, llevaba varios años con problemas de salud que se agravaron.
Arsenio, que nació el 24 de diciembre de 1930, dio al Deportivo la Copa del Rey de 1995 tras ascenderlo desde Segunda División, y también pasó por el banquillo del Real Madrid, entre otros muchos equipos en los que militó como jugador y entrenador.
Como futbolista vistió las camisetas del Deportivo, en el que estuvo en Primera División entre 1952 y 1957, pasó por el Sevilla en la temporada 1957/58, jugó en el Granada entre 1958 y 1964 y defendió la camiseta del Oviedo entre 1963 y 1965.
Disputó, en total, 238 partidos en la máxima categoría y otros 63 entre Segunda División y la promoción.
Arsenio en los banquillos
En su carrera en los banquillos pasó por el Deportivo en una primera etapa entre 1970 y 1973 con un ascenso a Primera División y un descenso a Segunda, subió posteriormente al Hércules en 1974, equipo al que dirigió otras tres temporadas, hasta 1977 en la máxima categoría, y dirigió también a Zaragoza, Burgos, Elche, Almería y Real Madrid, con otras etapas en el equipo coruñés.
Al Deportivo lo dirigió entre 1982 y 1985 en Segunda, de nuevo entre 1988 y 1991, año en el que logró el ascenso a Primera División, y meses después regresó al banquillo para ser el técnico del Superdepor.
Se quedó a las puertas del título de Liga en 1994, el que se le escapó con el famoso ‘penalti de Djukic’, pero logró la Copa del Rey de 1995, el primero de la historia del club, aunque recientemente le han otorgado la Copa España de 1912.
Arsenio acabó su carrera en el fútbol profesional en el Real Madrid en la temporada 1995/96, cuando sustituyó al argentino Jorge Valdano mediado ese curso, y después también dirigió a la selección gallega.
En los últimos años, en los que su salud se fue deteriorando, fue distinguido como hijo predilecto de Arteixo y también como hijo adoptivo de A Coruña.