El Seprona y la Unidad Cinológica Central que se desplazó a la isla con perros especialmente entrenados se desplegaron por la isla a raíz de distintos casos de envenenamiento producidos en La Palma durante el presente año.
Armas de fuego y munición de distintos calibres, diferentes productos fitosanitarios y medicamentosos, varias trampas ilegales para la caza dispuestas para su uso y varios tambores de pesca, sólo permitidos a pescadores profesionales han sido algunos de los elementos incautados por la Guardia Civil de La Palma y destinados a la caza furtiva o al envenamiento de anmales.
El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de la Caldera de Taburiente ha notificado diversas propuestas de sanción por la supuesta comisión de 17 infracciones a la normativa relacionada con la protección del medio ambiente y animal, en relación con la lucha que realiza la Benemérita contra los cebos envenenados.
A raíz de distintos casos de envenenamiento producidos en la isla de La Palma durante el presente año, tanto de fauna silvestre como de animales domésticos, el Seprona solicitó la colaboración de la Unidad Cinológica Central de la Guardia Civil ubicada en Madrid, la cual se desplazó a la isla con perros especialmente entrenados como detectores de venenos y productos fitosanitarios con los que se hacen de forma ‘casera’ cebos envenenados.
Durante el desarrollo de los servicios, los agentes realizaron diversas inspecciones a pie en grandes espacios abiertos, así como en diferentes explotaciones agrícolas y ganaderas de todos los municipios de La Palma, de cuyo resultado se intervinieron armas de fuego y munición de distintos calibres, diferentes productos fitosanitarios y medicamentosos, varias trampas ilegales para la caza dispuestas para su uso y varios tambores de pesca, sólo permitidos a pescadores profesionales.
Las 17 denuncias formuladas han sido remitidas a las diversas autoridades de la administración central y autonómica con competencia sancionadora.