Este jueves se votará en el congreso el último trámite parlamentario para la aprobación de la Ley de la Ciencia y la Tecnología. La única enmienda incorporada en el Senado podría cambiar uno de los objetivos principales de la iniciativa: propiciar la estabilidad laboral de los investigadores
La Ley de la Ciencia afronta este jueves el último trámite parlamentario antes de su aprobación definitiva. No obstante, afronta también el cambio más trascendente, que puede afectar a la contratación indefinida de miles de investigadores.
El pleno extraordinario del Congreso votará la única enmienda que se incorporó en el Senado a la nueva Ley de la Ciencia y la Tecnología. Una modificación que puede cambiar uno de los objetivos principales de esta iniciativa legislativa: propiciar la contratación indefinida y la estabilidad laboral de los investigadores.
Propuesta del PP en el Senado
Uno de los objetivos que se propuso el Gobierno con esta ley es reducir la precariedad laboral en el sector de la investigación. Ante esto, la enmienda, que se incorporó en la cámara alta a propuesta del PP, afecta de una forma directa a la contratación de miles de investigadores. En concreto, a los contratos ligados a fondos europeos, en cuyo caso podrán ser temporales.
La propuesta del PP en el Senado fue respaldada también por Vox, PNV, Junts y ERC, que en el Congreso había votado en sentido contrario y cuyo voto puede volver a ser hoy determinante.
Portavoces de Junts (socio de ERC en el Gobierno catalán y responsable de la cartera de Investigación y Universidades en la Generalitat) han advertido durante las últimas semanas que muchos centros de investigación catalanes estarán abocados al cierre si la enmienda no prospera.
El PP justificó la importancia de ese cambio en la necesidad de equiparar todas las contrataciones y de evitar cualquier forma de discriminación en ese sentido según el origen de los fondos con los que se financia una contratación, siempre y cuando esos fondos sean europeos.
Perpetuar la temporalidad
Desde el Gobierno, la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha insistido en que este cambio empeora la Ley. Cree que va a propiciar, si prospera, que se perpetúe la temporalidad de muchos científicos.
Varias asociaciones y sindicatos (como la Coordinadora Marea Roja de la Investigación; la Federación de Jóvenes Investigadores-Precarios; o CCOO) han incidido en que el sector de la investigación no debe seguir siendo «la excepción» laboral, sobre todo, cuando el Gobierno está apostando por la contratación indefinida. Además, han reclamado al Congreso, ante la votación de este jueves, que no mantenga un modelo «precario» para los científicos.