La Palma cuenta con más de 140 lugares con cazoletas excavadas. Estas estructuras se localizan, en la mayoría de los casos, junto al mar y, aún hoy, se desconoce con exactitud el motivo que llevó a los antiguos canarios a picar sobre el suelo y pulir su interior.
Es un auténtico misterio junto a la costa y los rompientes de La Palma, aunque también se encuentran en otras islas. La teoría más extendida las considera recipientes que formaban parte de rituales religiosos en la época prehispánica.
El fotógrafo José Fernández Arozena las ha recopilado y las ha dado a conocer más allá de las islas, convirtiéndose en imagen del Día de las Ciencias de la Tierra.