Los profesores preparan un curso en el que tienen que afrontar los cambios producidos por la nueva reforma educativa, entre otras cuestiones
Los primeros que ya han regresado a los colegios son los profesores que este jueves han abierto las aulas sin escolares a los que se les espera la próxima semana.
Para que todo esté a punto con vistas al nuevo curso escolar, los profesores, tras las vacaciones, se ponen al día y preparan de la mejor manera posible la vuelta a la rutina.
En este inicio de curso desaparecerán prácticamente todas las medidas de protección ante la Covid-19 que generará una cierta sensación de normalidad en las aulas. No obstante, el resto de situaciones supondrán nuevos retos e incertidumbres que pondrán a prueba nuevamente el sistema educativo, lo que supondrá sin duda nuevos esfuerzos para toda la comunidad educativa.
Cambios por la nueva reforma educativa
El curso escolar, que empezará en la mayor parte del país entre el 8 y 12 de septiembre, supondrá un esfuerzo de adaptación de profesores y alumnos a los cambios derivados de la última reforma educativa, no exentos de polémica, y a las nuevas leyes de Protección a la Infancia y Formación Profesional.
Uno de los quebraderos de cabeza para los más de 700.000 profesores de enseñanzas no universitarias será implantar los currículos aprobados a principios de año -lo que se aprende en las aulas y el modo de hacerlo- en 1º, 3º, 5º de Primaria; 1º y 3º de Secundaria, 1º de Bachillerato y FP. El curso 2023-2024 será el turno del resto de cursos y de la nueva prueba de acceso a la universidad.
Canarias es una de las siete comunidades que aún no tiene publicado el currículo de la denominada ley Celá, el currículo que los profesores tienen que impartir este curso. La Consejería de Educación le resta importancia, y, según manifiesta la responsable del área, Manuela de Armas, hay borradores desde junio.