Tan solo cinco semanas antes de las elecciones en Brasil, los candidatos debatieron entre ellos con todo tipo de acusaciones
La noche del pasado domingo se enfrentaban en un debate televisado el expresidente, Luiz Inácio y el actual mandatorio, Jair Bolsonaro. Cinco semanas antes de las elecciones en Brasil, los candidatos presidenciales se enfrentaron por primera vez en un debate electoral.
Los candidatos, que son los claros favoritos en las elecciones del país, intercambiaron todo tipo de acusaciones frente a frente. Bolsonaro, afirmó que el gobierno de Lula fue el más corrupto de la historia del país. Acusaciones que el expresidente no rebatió directamente. Es así como Bolsonaro lo acusó de que su Gobierno estuviera marcado por la cleptocracia para ganar apoyo dentro del Parlamento».
Por otro lado, Lula citó medidas anticorruptivas y de transparencia de su Ejecutivo. Además, recordaba los éxitos que obtuvo su mandato, como más empleo, inclusión, educación…También el hacer frente a una menor deforestación de la Amazonia.
«El país que dejé es un país que la gente extraña», declaraba Lula tras acusar a Bolsonaro de destruir el país.
El Partido de los Trabajadores de Lula lidera los sondeos con un 47% de votos
Además de Lula y Bolsonaro, también participaban en el debate el candidato del Partido Democrático Laborista (PDT), Ciro Gomes. Este se erige como tercera opción ante la polarización de los favoritos; la candidata del Movimiento Democrático Brasileño, Simone Tebet; Luiz Felipe de Novo y Soraya Thronicke de Unión Brasil.
Según la última encuesta publicada, de Datafolha, los datos de mediados de agosto muestran que el Partido de los Trabajadores de Lula lidera los sondeos con un 47% de las intenciones de voto, frente al 32% ciento del actual dirigente del país. No obstante, esta brecha entre los candidatos se redujo en el último mes, ya que la diferencia en julio era de 21 puntos porcentuales a diferencia de los 15 actuales.
